Este año Nicole Kidman será la reina de Cannes, con tres películas y una serie en la selección oficial. A los 49 años, esta actriz, que siempre supo reinventarse, sigue una carrera audaz, que mezcla éxitos de taquilla con cine independiente.
Este año dos de las películas en las que participó optan por la Palma de Oro. La primera es La seducción, de Sofia Coppola, protagonizada por Colin Farrell, Elle Fanning y Kirsten Dunst, que cuenta la historia de un soldado que se esconde en un internado para chicas durante la Guerra de Secesión en Estados Unidos.
La actriz australiana también aparece junto a Colin Farrell en The Killing of a Sacred Deer, una película del director griego Yorgos Lanthimos, autor de la sorprendente The Lobster.
Fuera de la competición, esta pelirroja con rostro de porcelana presentará en la Croisette How to Talk to Girls at Parties, del estadounidense John Cameron Mitchell.
Esta película, coprotagonizada por Elle Fanning, es una historia de extraterrestres que transcurre entre bambalinas de la escena del punk en el Londres de la década de 1970.
Además, estará presente con la segunda temporada de la serie de televisión Top of the Lake, de la realizadora neozelandesa Jane Campion, exhibida en una sesión especial.
La actriz, que cuenta con tres Globos de Oro y un Óscar por su interpretación de Virginia Woolf en Las horas, de Stephen Daldry, en 2003, ya ha estado en múltiples ocasiones en Cannes.
En 2001 desfiló por la alfombra roja por ser la protagonista de la película de apertura del festival, Moulin Rouge, de Baz Luhrmann, una comedia romántica y musical en la que interpretó a una bailarina de cabaret. En 2003, el drama Dogville, de Lars von Trier, la volvió a llevar a la Croisette, una experiencia que repitió con el thriller Paperboy, de Lee Daniels de 2012. En 2014, la película biográfica Grace de Monaco, en la que interpreta a la actriz convertida en princesa, de Olivier Dahan, abrió el festival.

