Los jugos naturales tienen muchos adeptos. Además de refrescar, resultan una opción saludable frente a otras bebidas de ingredientes artificiales.
Durante los últimos años, la ingesta de jugos de origen frutal y vegetal se ha vuelto una tendencia saludable para quienes procuran cuidar su organismo.
Celebridades internacionales como Gwyneth Paltrow y Sarah Jessica Parker, así como el abogado y cineasta australiano Joe Cross (quien se sometió a una dieta rigurosa a base de jugos en un acto desesperado por recuperar su salud decaída) promueven en los medios internacionales las infinitas bondades de cada sorbo.
La naturaleza ofrece un sinfín de opciones, y más allá del tradicional jugo de naranja, una variedad extensa de frutas, vegetales, granos y semillas, se fusionan en un solo vaso con la promesa de asegurarle un cuerpo vigoroso.
Con el inicio de un nuevo año se reactivan las ansias por mejorar la figura y deshacerse de las libras acumuladas durante las fiestas.
Muchos ven en el juicing o jugoterapia, un método ideal para perder peso y, de paso, depurar el organismo.
La health coach Julissa Alvarado explica que uno de los mayores beneficios de esta práctica es la rápida absorción de nutrientes que, a su vez, deriva en el fortalecimiento del sistema inmunológico, mayor energía, reducción de inflamaciones y una piel más limpia, por ejemplo.
Según Alvarado, la jugoterapia es una práctica que se encamina a un estilo de vida saludable y no al reemplazo de alimentos sólidos.
Con ella concuerda la nutricionista Laura Turner, quien indica que una dieta a base de jugos aporta grandes cantidades de vitaminas C y K, pero que igualmente escasean otros sustancias esenciales para una alimentación balanceada.
La especialista anota que las famosas dietas “detox” a base de jugos, prometen en 7 a 10 días una reducción de peso, “que básicamente sería de agua y que tendría el mismo efecto de un régimen de comida balanceada”.
No obstante, añade Alvarado, con un jugo fresco se puede absorber hasta el 99% de los nutrientes de sus compuestos.
“Es equivalente a tomar un suplemento”, apunta la consejera, quien agrega otros potenciales como su fácil ingesta entre niños y adultos y para quienes no les gusta comer frutas y vegetales.
Para la emprendedora Mayi Carles, la jugoterapia tiene un punto interesante: es darse un sorbo de lozanía.
Carles, quien junto a su padre, Rafael, lleva adelante la línea de jugos naturales Life Blends, asegura que beber jugos naturales ha sido un aspecto sustancial en su vida, heredado de su papá, quien por años acostumbraba a hacer sus propias mezclas.
Para Carles, la línea que manejan se deriva de un estilo de vida, que lejos de responder a una moda, busca remontarse a las bases de una buena alimentación. “Por ejemplo, consumo un sorbo de wheatgrass diariamente, porque sus valores equivalen aproximadamente a dos libras de espinaca”, dice. “Es mi forma de complementar, de forma sencilla, mi alimentación”, agrega.
Con ella concuerda Yahan Bazán, propietario de Green Bar, quien hace cuatro meses abrió su primera barra de jugos como una forma de promover un mejor estilo de vida en la ciudad.
En su local, Bazán, ofrece decenas de recetas orgánicas que han calado en una clientela heterogénea, “desde niños y deportistas, hasta veganos y adultos mayores”, asegura el empresario, cuyo interés ulterior es poder ampliar este concepto a otros puntos del país.
Jugos verdes, mezclas con cayena, fresa, pepino o kale sobresalen como base de su carta de jugos y blend saludables.
Esta misma premisa también sirvió de inspiración a los creadores del restaurante Eco Fruit, que “buscan ofertar recetas orgánicas y ecológicas en el istmo”.
El local, manejado por Marisol Jiménez, Albel López y el chef Jean Giroldi, ofrece alimentos y jugos orgánicos preparados exclusivamente con productos nacionales y orgánicos.
Y es que “hacía falta un sitio ecoamigable y con una perspectiva saludable”, afirma Jiménez, quien explica que entre sus creaciones ofrecen jugos como complementos de cada platillo.
Un sinfín de hortalizas y frutos dan vida a los refrescos que, según Giroldi, cumplen con distintas propiedades como diuréticas o relajantes, por ejemplo.





