Traducimos y tradujimos: La primera denota una acción presente (del momento en que se habla), como en el enunciado: «En este momento traducimos una novela del alemán», pero también el llamado presente habitual (la acción que hacemos periódicamente), como en «Todos los lunes traducimos cien verbos del inglés». Con las preposiciones ‘hasta’ o ‘desde’, indica extensión temporal: «Desde agosto traducimos los textos griegos» (que equivale a «Desde agosto nos dedicamos a traducir los textos griegos» o con valor futuro «Hasta octubre traducimos los documentos legales; después, a otra cosa», enunciado equivalente en todo a «Hasta octubre vendemos estos productos; después, haremos algo diferente». ‘Tradujimos’, sin embargo, es pasado: «Hace dos meses tradujimos la declaración del testigo». Así pasa en todos los pares de estos verbos terminados en –ducir, como conducimos/condujimos; introducimos/introdujimos; deducimos/dedujimos, etc.
Algunos verbos requieren que usted los conjugue con las formas me, te, se, nos, etcétera, antepuesta o sin estas.
Pero usar o no estas variantes cambia el significado del verbo.
La diferencia entre ‘ingerir’ e ‘injerir’ no es solo ortográfica (escritura) o semántica (significado: introducir algo por la boca: medicamentos, alimentos, bebidas… o entrometerse en asuntos ajenos), sino también morfológica (la forma). ‘Injerir’ requiere que se diga: «Nosotros no nos injerimos en ese asunto legal»; «Ustedes no se injieran en lo que no les atañe».
El contexto determina de qué estamos hablando, incluso si la comunicación es verbal y pese a que las respuestas pudiesen ser descontextualizadas, como se escuchó hace unos días a un funcionario, que, a la pregunta clara y correcta del periodista «¿Es cierto, como dice la contraparte, que ustedes se están injiriendo en sus asuntos internos?», contestaba: «Nosotros no estamos injiriendo/ Nosotros no estamos ingiriendo» (¿?)
Claro está que la respuesta debió ser: «Nosotros no nos estamos injiriendo».
Ahora, si nos preguntasen: «¿Están ustedes ingiriendo algún medicamento?», podríamos responder: «Nosotros no estamos ingiriendo [ningún medicamento]».
Queda claro entonces que los pares «No podemos ingerir…» y «No nos podemos injerir», no solo se escriben diferente (g/ j), sino que, además, significan algo diferente en cada caso y, para ser consecuente con eso, el primero debe mencionar lo ‘ingerido’: alcohol, carbohidratos, gaseosas, carnes rojas, etcétera, mientras que el segundo requiere la combinación nos + verbo (s) y la preposición en (entrometerse en algo).