La supervivencia de muchos teatros británicos, como el Globe de Shakespeare, se ve amenazada por la pandemia del nuevo coronavirus y la demora de la ayuda gubernamental, que tardó demasiado, advierte un informe parlamentario.
El sector cultural se enfrenta a “una amenaza existencial debido a la Covid-19 y a la incertidumbre persistente que lo acompaña”, recalca este informe de la Comisión Digital, de la Cultura, de los Medios de Comunicación y del Deporte de la Cámara de los Comunes.
Este sector emplea a 700 mil personas. La pandemia lo ha privado de ingresos debido a la instauración del confinamiento el 23 de marzo, lo que ha desembocado en cierres o despidos.
Alrededor del 70% de los teatros o compañías de producción pueden tener que cerrar antes de finales de año, incluido El Globe, réplica del teatro al aire libre de Shakespeare, o el Old Vic en Londres, después de tener que cancelar 15 mil representaciones y registrar una pérdida de más de 300 millones de libras esterlinas (381 millones de dólares) en los ingresos de taquilla durante las primeras 12 semanas de confinamiento.
A principios de julio, el gobierno conservador anunció una ayuda de 1,570 millones de libras (1,730 millones de euros, 2,000 millones de dólares), pero llega “demasiado tarde”, insiste el informe.
El peligro para el Reino Unido, con gran producción cultural, es convertirse en un “desierto cultural”, advirtió el presidente de la comisión, Julian Knight.
El informe recomienda un IVA reducido sobre las entradas durante los próximos tres años y medidas fiscales.
Las salas de espectáculos podrán reabrir el 1 de agosto en Inglaterra.
En 2018, unos 1,100 teatros británicos emplearon a 290 mil personas, con unos ingresos de taquilla de 1,280 millones de libras (1,600 millones de dólares) y 34 millones de espectadores, o sea más que todos los partidos de fútbol de la liga.

