Tuvieron que pasar dos años para que el público panameño pudiera reencontrarse con uno de los eventos artísticos más importantes del país, el Festival Internacional de Artes Escénicas (FAE 2022), que se realizará entre el 5 y el 10 de abril en formato tanto presencial como virtual.
Esta edición incluirá teatro de España con Bendita Gloria y de Portugal con Electra; el unipersonal Tijuana de México y las coreografías Anna de Francia y Drift de Estados Unidos, todos espectáculos reconocidos por la crítica internacional y aclamados por el público.
El encuentro artístico también sumará puestas en escena de Colombia y Cuba que se presentarán al aire libre, así como una selección de lo mejor del teatro local: obras dirigidas por los directores Abdiel Tapia, Javier Stanziola, Renán Fernández y Roy Williams.
Y, como cada año, se realizarán conversatorios, talleres y clases magistrales para los estudiantes y profesionales de las artes escénicas.
Además, el festival dedicará esta onceava versión a una de sus colaboradoras más preciadas, la reconocida artista panameña Vielka Chu, destacada coreógrafa, gestora artística y comprometida colaboradora del FAE, fallecida en 2021.
Algunas de las piezas
El drama griego Electra (Portugal) fue una creación colectiva basada en diferentes versiones del personaje principal, Clitemnestra, revisadas de los clásicos de la literatura de Sófocles y Eurípides, bajo la dirección de José Carlos García y Cláudia Nóvoa.
Pero la versión de Companhia do Chapitô de esta tragedia, que originalmente es eso: una tragedia sangrienta, llena de venganzas, traiciones y engaños, se convierte en una hilarante y ocurrente comedia. La actriz Susana Nunes señaló, en exclusiva para La Prensa que, aunque no sea el enfoque tradicional, “respetamos la trama y la creencia en el efecto curativo de la catarsis, pero esta vez a través de la risa”.
La comedia es el lenguaje escénico característico de esta compañía portuguesa: “El acercamiento a la tragedia desde este punto de vista humorístico hace que los grandes conflictos del ser humano se relativicen. La comedia vive del drama, la clave está en cómo contarlo”, apuntó la actriz.
Los lenguajes del amor
En Bendita Gloria (España), los personajes son seres que aman de manera extrema. Siempre se habla sobre el amor de una manera idílica y olvidamos que tiene muchas aristas, demasiadas; que es un sentimiento poliédrico, mutante, manipulable y, en muchas ocasiones, corrosivo. La puesta ibérica habla de eso: “de las otras maneras de manifestar y utilizar el amor como tapadera de otros intereses y de las diferentes formas de amar y de reclamar ser amados”, apunta Pepe Bablé, el director y diseñador escénico de la propuesta, que inaugurará el FAE 2022.
Bublé se encargó de desenmarañar ese lado del amor, luego de un minucioso ejercicio con el texto y un exhaustivo trabajo actoral de su elenco (Jay García, Susana Rosado, Carmen Reiné y Charo Sabio), cableando a tierra una dramaturgia “compleja”, para transformarla en una historia sencilla: “Sólo existen sobre el escenario el actor y la palabra para relatar la historia en dos estilos diferentes, pero que se cruzan: la tragedia y la tragicomedia, géneros presentes, como en la vida misma, pero expresados de manera intimista y poética a pesar de lo que narra”, explicó a La Prensa.
Nuestro talento
Se presentarán cinco piezas nacionales sobresalientes. Una de ellas es La casa de Bernarda Alba, clásico tradicionalmente representado por mujeres pero que, en esta versión, es interpretada por un reparto enteramente masculino: “Queríamos centrarnos en ese trabajo de búsqueda –explicó su director– preparando ese cromosoma femenino y manejando esas emociones y sensibilidades, olvidándonos un poco del género, para embarcarnos en ese encuentro con la más profunda humanidad”.
Fernández también dirige Red, que saca a la luz realidades sobre el acoso sexual y el suicidio a través de historias aparentemente desconectadas que se entrelazan en el tiempo.
Celebrar la fuerza femenina
La coreógrafa Laura Arend (Laboration Art Company) decidió inspirarse en la trayectoria de cinco personajes femeninos germánicos del siglo XIX al XXI, mujeres poco reconocidas u olvidadas, para crear su pieza coreográfica: Anna.
Junto a la bailarina Fanny Sage, Laura Arend construye sobre el escenario cuatro fragmentos alrededor de estas heroínas en la sombra: la científica Lise Meitner, la activista anti-nazi Sophie Scholl, la aventurera Clärenore Stinnes, la coreógrafa Pina Bausch y la compositora Clara Schumann, cuya música acompaña a ciertos cuadros.
“Anna es una oda a la determinación y al coraje de estas mujeres que toman el control de sus destinos, viven sus sueños y liberan su verdadera esencia”, explicó la coreógrafa.
