1
El exceso de consumo de agua puede contribuir al aumento de peso.
Falso. El agua es un nutriente esencial que interviene en todas las funciones del organismo, pero hay que destacar que su aporte de calorías es nulo, por lo que no contribuye al problema de la obesidad. Lo importante aquí es que el agua sea su bebida de elección, en vez de los jugos o sodas que son ricos en sodio, azúcar y calorías.
2
Los tés pueden quemar grasa.
Falso. Todos los tés tienen efecto diurético (ayudan a perder líquido) y es por pérdida de líquido que puede haber cambios en el peso, no por pérdida de grasa corporal. Lo cierto es que el té puede disminuir la absorción de las grasas a nivel intestinal, evitando que estas se acumulen en el organismo.
3
Eliminar los desayunos de mi dieta diaria me ayudará a bajar de peso más rápido.
Falso. El desayuno es necesario, porque al consumir alimentos en las primeras horas de la mañana mantenemos el metabolismo activo durante el resto del día. Si omitimos el desayuno, nuestro metabolismo se vuelve lento, disminuye el gasto calórico por parte del organismo y las calorías se acumulan como tejido adiposo. Si usted desea iniciar una dieta saludable, consulte a un nutricionista.
4
Los jugos y sodas de dieta no tienen calorías.
Falso. La mercadotecnia ha explotado esta moda saludable para convertirla en un negocio muy lucrativo, en realidad es publicidad engañosa. No todo lo etiquetado light o cero calorías realmente lo es. Lo más importante es revisar los aportes de sodio, carbohidratos, grasa y calorías por porción, y luego concluir si realmente es un alimento bajo en calorías.
5
El vino es beneficioso para la salud.
Cierto. Al vino se le atribuye un efecto protector a nivel cardiovascular por su contenido de antioxidantes y otras sustancias. Se recomienda consumir una copa de vino al día para obtener este efecto protector. Recuerde, el vino es beneficioso para el organismo solamente si se consume a diario y en cantidades moderadas (no más de una copa).
6
El café es una bebida que contiene pocas calorías.
Cierto. Una taza de café negro contiene hasta 20 calorías, el problema es lo que se agrega a la taza de café. Una taza de café con leche (aporta 90 calorías) y dos cucharaditas de azúcar (40 calorías) sería el equivalente a 130 calorías, y la mayoría de las personas toman más de una taza de café al día. Aquí es donde toman importancia los productos (leche y azúcar) de “dieta”.
7
Las palomitas de maíz del cine nos hacen aumentar de peso, porque comemos sentados.
Falso. Las palomitas de maíz con mantequilla de mayor tamaño en el cine pueden tener hasta 1200 calorías, y si a esto le agregas una soda “grande” (alrededor de 500 calorías), esto explica por qué al comer en el cine aumentamos de peso. Las palomitas de maíz son un excelente snack, si se consumen sin mantequilla ni caramelo y en pequeñas porciones. Recuerda sustituir las bebidas azucaradas por agua.
8
Disminuir la ingesta de carbohidratos hace que baje de peso más rápido.
Cierto. Los carbohidratos son necesarios, ya que funcionan como fuente principal de energía, pero al consumirlos en grandes cantidades y no utilizarlos, se acumulan en nuestro organismo y contribuyen a la obesidad. Hay que evitar la ingesta de carbohidratos en horas de la tarde y noche donde el consumo de energía es menor. El secreto es hacer una dieta balanceada junto a ejercicio cardiovascular.
9
Las semillas de tomate y pepino pueden causar obstrucción intestinal.
Falso. La gran mayoría de las semillas aportan fibra, y esta ayuda a mejorar el tránsito intestinal, siempre y cuando esta fibra se consuma con un adecuado aporte de agua. Si consumes fibra sin suficiente agua se crea el efecto contrario, obstrucción y estreñimiento. Las semillas por sí solas no son las causantes de los problemas intestinales, sino los malos hábitos alimentarios.
10
Se comenta que 20 besos son necesarios para quemar las calorías de un pedazo de ‘pizza’.
Falso. A la mayoría de las personas les gusta dar y recibir besos; sin embargo, la cantidad de energía empleada para besar es mínima y es variable, según la intensidad del beso. Actividades como caminar o trotar emplean mucha más energía, por lo que son las recomendadas para quemar calorías. Sin embargo, dar besos o abrazos es una excelente manera de dar y recibir amor, y esta clase de amor no engorda.
Los autores son colaboradores del Grupo Médico Panamá y trabajan en la campaña nacional de #PrevenciónCardiovascular.

