La conjugación correcta de los verbos demuestra dominio del idioma y buen nivel cultural del hablante.
Con demasiada frecuencia, lamentablemente, se escucha: habíanos en lugar de habíamos. “Nos habíanos dormido, cuando llegaron”. Habíanos es incorrecto, lo correcto es habíamos. Para la conjugación, la terminación del pretérito imperfecto o copretérito, de la tercera persona plural, modo indicativo es mos nunca nos: lavábamos, cosíamos, vivíamos.
El yerro quizá se deba a la equivocada asociación que se hace entre la variante nos del pronombre nosotros y una supuesta terminación del verbo; de ahí que se escuche: amar: amábanos, parecer: parecíanos, subir: subíanos; en vez de amábamos, parecíamos, subíamos.
Tales desatinos deforman el discurso, que empeora gravemente cuando la conjugación incorrecta sufre, además, dislates de supresión, como en el caso de: ´Tábano´ en el río la semana pasada”, en vez de: “Estábamos en el río la semana pasada”. Este error resulta casi una broma: en el DRAE la primera acepción de tábano es: “Insecto díptero, del suborden de los Braquíceros, de dos a tres centímetros de longitud y de color pardo, que molesta con sus picaduras principalmente a las caballerías”; es decir, una especie de mosca.
La Academia dice:
Cuidemos la correcta conjugación, nunca sustituyamos la m por la n en las terminaciones de las formas del pretérito imperfecto o copretérito. Digamos: estudiábamos, leíamos, vivíamos, denotan atención y cultura del hablante.