Los casos de pornografía infantil en el país van en aumento, según lo confirman cifras de las fiscalías Primera y Sexta especializadas en delitos contra la libertad e integridad sexual.
De hecho, en lo que va de este año se han recibido 50 reportes de pornografía infantil desde Washington, Estados Unidos (EU).
En 2015, este delito cerró con 983 reportes, mientras que en 2014 hubo apenas 26 denuncias, según el Informe de Derechos Humanos de Panamá.
Mildred González, fiscal sexta de circuito, advirtió que la pornografía infantil es hoy en día “el fenómeno [criminal] más grande que tenemos, [pues] el agresor se mantiene tras las redes”.
González explicó que la mayoría de los casos se origina por alertas de Interpol, que por medio de patrullajes cibernéticos detecta cuentas de personas que incurren en esta práctica y luego son rastreadas a través del IP de la computadora.
Detalló que quienes sacan provecho de este ilícito practican lo que se conoce como grooming, una conducta en la que el adulto gana la confianza del menor haciéndose pasar como niño en las redes sociales. Luego, extraen fotos de menores en poses sugestivas y las envían a páginas pornográficas.
El Código Penal establece penas de cárcel entre 5 y 10 años para quienes incurran en el delito de pornografía infantil. Las sanciones pueden aumentar, de acuerdo con las características de cada caso. En 2014, la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito alertó sobre el auge de la pornografía infantil en el mundo.
