8:07 a.m. - VIENA, Austria (EFE).- Aliza Olmert, la esposa del primer ministro israelí, Ehud Olmert, reconoce que hoy ve el futuro con un mayor pesimismo que hace diez años, aunque cree que "las negociaciones entre Abas y mi marido han abierto una nueva puerta.
En declaraciones al diario vienés "Kurier" de hoy, Aliza Olmert, pintora, escritora y una pacifista de izquierdas, cuya postura política difiere de la de su marido a pesar de más de 40 años de convivencia, considera que "la identidad de Israel es muy viva, pero también muy inestable".
En su libro autobiográfico, titulado en alemán "Ein Stück vom Meer" (Un trozo de mar), cuenta el inicio del Estado de Israel desde las vivencias de una niña de una familia de inmigrantes.
"Quise mostrar que todos los judíos que vinieron de Europa vivieron un simple destino de inmigrantes. Llegaron a una región donde no eran deseados, donde no eran aceptados por los lugareños. Para los judíos de Palestina los inmigrantes de Europa encarnaban una imagen del pasado, la del judío desamparado", explica.
Para Aliza Olmert, Israel sigue siendo un país de inmigración, marcado por "esos miedos profundos de perder de nuevo la propia existencia, el sentimiento de tener que luchar siempre para sobrevivir".
Respecto al destino del pueblo palestino, dice sentir "tristeza por el hecho de que no logramos cooperar" con los palestinos, y por "no haber hecho algo mejor de esta vecindad".
