Los dos hospitales que trataron a los heridos del ataque a un club gay que dejó 49 muertos en Orlando, en el centro de Florida, exoneraron a las víctimas de gastos que superan los cinco millones de dólares, informaron ambas instituciones.
El tiroteo de la madrugada del 12 de junio en el bar Pulse "fue una tragedia horrenda para las víctimas, sus familias y toda nuestra comunidad", dijo el presidente de Orlando Health, la red de clínicas que opera entre otros el centro médico Orlando Regional, en un comunicado obtenido el jueves por la AFP.
"Durante estos difíciles momentos, muchas organizaciones, individuos y organizaciones de caridad vinieron a Orlando Health a darnos su apoyo. Ésta es nuestra forma de devolver la amabilidad", añadió.
La clínica, que trató a la mayoría de los 53 heridos, no buscará cobrar costos directamente a los pacientes o sus familiares y, en cambio, buscará otras maneras de recuperar gastos, como fondos federales, aseguradoras y programas de compensación de víctimas.
"Pero aún a pesar de estas múltiples fuentes de financiamiento, el total de gastos sin reembolsar por Orlando Health podrían exceder los 5 millones de dólares", señaló la institución en el comunicado.
Nueve de las víctimas murieron en este centro médico. También el Florida Hospital, donde recibieron tratamiento una docena de personas, indicó que las víctimas no tendrán que pagar de su bolsillo.
"Esperamos que este gesto se sume al corazón y la buena voluntad que define a Orlando", dijo Daryl Tol, presidente del hospital, en un comunicado citado por el diario local Orlando Sentinel.
Los gastos del segundo hospital pueden alcanzar los 525 mil dólares, añadió el diario.
Las autoridades aún investigan el tiroteo durante el cual Omar Mateen, un estadounidense de origen afgano de 29 años, reivindicó ser un combatiente islámico.
La policía ha sido criticada por supuestamente haber permitido que tuviera lugar un impasse de cerca de tres horas entre la llegada de las fuerzas del orden y el abatimiento de Mateen.
