El secretario de Estado estadounidense, Mike Pompeo, y su homólogo chino Wang Yi dieron muestras este lunes de intercambios poco diplomáticos en Pekín, unos días después de que el vicepresidente de Estados Unidos Mike Pence formulara unas críticas que China calificó de "ridículas".
De paso por Pekín al final de una gira asiática en la que se reunió con el dirigente norcoreano Kim Jong Un, Pompeo escuchó los reproches del ministro de Relaciones Exteriores chino sobre las últimas medidas tomadas por Washington, desde la guerra comercial hasta las ventas de armas a la isla rival de Taiwán.
"Estas medidas dañan la confianza mutua y empañan el futuro de las relaciones sino-estadounidenses, lo cual va completamente en contra de los intereses de los dos pueblos", lamentó Wang ante los periodistas al inicio de su encuentro con su homólogo estadounidense.
"Nosotros exigimos que Estados Unidos cese estas acciones imprudentes", recalcó, e invitó a los dos países a cooperar con el fin de evitar "caer en el conflicto y la confrontación".
También directo, el jefe de la diplomacia de Donald Trump, que no fue recibido por el presidente Xi Jinping, reconoció que los dos países tienen "desacuerdos fundamentales".
"Estamos muy preocupados por las medidas adoptadas por China y agradezco poder discutir hoy puesto que se trata de una relación extremadamente importante", dijo.
La visita de Pompeo se produjo cuatro días después de que Pence dijera, en una audiencia en un instituto de análisis conservador en Washington, que China se entromete en la política estadounidense para lograr un cambio de presidente.
El vicepresidente de Estados Unidos también acusó a China de lanzar un "salvavidas" a Venezuela con "cuestionables préstamos" a cambio de petróleo, y criticó que haya convencido a Panamá, República Dominicana y El Salvador de romper lazos con Taiwán.China calificó el viernes de "injustificadas" y "ridículas" las acusaciones de Pence.
Pompeo lamentó este lunes delante de su homólogo la suspensión -según él por parte de China- de una reunión entre los ministros de Defensa de los dos países, prevista para octubre en Pekín.
Pero, el ministro Wang Yi respondió que la reunión "no fue suspendida por los chinos. Es un hecho", dijo sin brindar más detalles.
