El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, afirmó este viernes que en septiembre pidió a su homólogo de Rusia, Vladimir Putin, el cese de los ataques cibernéticos rusos que se habían registrado durante la campaña para las elecciones de noviembre.
En su última conferencia de prensa del año, Obama dijo que cuando se encontró con el presidente Putin en China, durante una cumbre del G20, le dijo que eso “debía cesar y que habría serias consecuencias si no lo hacía”.
En esa misma reunión, Obama mantuvo una conversación similar con el presidente chino, Xi Jinping, por ataques cibernéticos a empresas estadounidenses que se habían originado en China.

Después de esa conversación, afirmó el mandatario, había “alguna evidencia” de que los ataques chinos habían mermado.
Por ello, Obama dijo este viernes que ahora estaba determinado a enviar un “mensaje claro” a Moscú ante las denuncias de la CIA y el FBI de una presunta interferencia rusa en las elecciones estadounidenses para favorecer a Donald Trump.
“Nuestro objetivo sigue siendo mandar un mensaje claro a Rusia y a otros para que no hagan esto, porque nosotros podemos hacerles cosas a ellos”, apuntó.
Obama, sin embargo, agregó que para la Casa Blanca “es importante hacer esto de una manera planificada y metódica. Algunas de esas cosas las hacemos públicamente. Algunas de ellas las hacemos de forma que ellos lo saben, pero nadie más”.
“Cuando llegue el momento de tomar ciertas acciones que podamos divulgar públicamente, lo haremos”, señaló Obama, quien abandonará el cargo el 20 de enero, cuando Trump asuma las riendas de Estados Unidos.
El mandatario evitó responsabilizar directamente al líder ruso de la interferencia en las elecciones (que incluyó el pirateo de correos del jefe de campaña de la candidata demócrata, Hillary Clinton, y del Comité Nacional del partido demócrata), pero apuntó que "poco pasa en el gobierno ruso sin que Vladimir Putin lo sepa".
CRISIS EN SIRIA
Por otra parte, Obama declaró este viernes que el mundo esta “unido” ante el “salvaje asalto” contra la ciudad siria de Alepo por el ejército del presidente Bashar al Asad con el apoyo de Rusia e Irán.
“El mundo está unido en el horror ante el salvaje asalto del régimen sirio y sus aliados rusos e iraníes en la ciudad de Alepo”, dijo Obama en rueda de prensa.
“Hemos visto zonas enteras reducidas a escombros y polvo. Seguimos viendo reportes de civiles ejecutados. Éstas son todas horrorosas violaciones del derecho internacional", agregó.
Según Obama, “la responsabilidad por esta brutalidad yace en un solo lugar: el régimen de Asad y sus aliados, Rusia e Irán”. El presidente “Asad no puede obtener legitimidad a golpe de masacres”, añadió.

