Tribunal italiano exige devolver $30 millones

Comenzó ayer el juicio por vía administrativa ante el Tribunal de Cuentas que imputa a Valter Lavítola, a su exsocio Sergio De Gregorio y a su abogado comercial, Vincenzo Ghionni, por malversar fondos públicos por más de 30 millones de dólares en su gestión como director del periódico L’Avanti.



El fiscal de la Corte de Control Patrimonial Público de Italia, Tammaro Maiello, explicó que Lavitola y De Gregorio operaron conscientemente un maquillaje de balances contables, a través de operaciones inexistentes en la empresa y elaboraron un sistema de facturación completamente falso. Según la acusación, estas prácticas ilícitas evidencian “la voluntad deliberada” de cometer el delito de fraude fiscal.



Además, se ha descrito a Lavítola como único administrador de la sociedad editorial de L’Avanti! desde marzo de 1997 a septiembre de 2011, y como dominus (maestro) de las operaciones ficticias concebidas para perpetrar la malversación.



En palabras de su abogado, Gennaro Freddella, el futuro de Lavítola está “en ruinas”. El 9 de noviembre de 2012, Lavítola llegó a un acuerdo con el juez de las investigaciones preliminares del Tribunal de Nápoles, Francesco Cananzi, que lo condenó por la vía penal a 3 años y 8 meses de prisión por los delitos de estafa y malversación de fondos públicos, de los más de 30 millones de dólares que ahora tendrá que devolver. La Guardia de Finanzas del Núcleo Operativo de Nápoles le confiscó en julio pasado al acusado bienes valorados en más de cuatro millones de dólares.