Con una portada en fondo negro y un titular que dice "Zarpazo a la libertad de expresión", el diario venezolano El Carabobeño anunció hoy, 17 de marzo de 2016, que circula por última vez en su edición impresa.
"Hoy se está concretando un vil zarpazo contra uno de los más sagrados derechos del ser humano: El derecho a estar informado. Ha llegado el impensable día en que El Carabobeño pone fin a sus ediciones impresas. Es el resultado de un enfrentamiento entre la verdad y el derecho que tiene la ciudadanía a estar informada, y un gobierno que llegó al poder a través de la malicia y el engaño para administrar el erario nacional y las instituciones como mejor les convenga. La agonía ha sido larga y dolorosa. Se agotaron las gestiones en procura de la asignación de divisas a El Carabobeño para pagar deudas por insumos adquiridos en el exterior. Luego, con la creación de la Corporación Alfredo Maneiro, al Diario del Centro se le ha negado, desde hace un año, la cuota de papel que legalmente le corresponde, porque se trata de una mercancía adquirida con dinero del Estado venezolano. Ha sido un ensañamiento con una empresa que, desde su fundación en 1933, nunca le temió a los ocupantes del Palacio de Miraflores, ni siquiera al tirano Juan Vicente Gómez, quien mandó al exilio en Cuba a nuestro director fundador don Eladio Alemán Sucre", señala el diario en los primero párrafos de su nota de tinte editorial.
El diario asegura que su despedida es solo un hasta luego, que saben que volverán porque "no se puede acabar una historia de 82 años por el simple capricho de unos gobernantes soberbios y antidemocráticos".
Al cierre de la edición impresa del diario le precedió, en 2015, la de su edición infantil, por falta de papel.
Durante su última Asamblea General, realizada en Charleston, Carolina del Sur, en octubre de 2015, la Sociedad Interamericana de Prensa emitió un informe sobre Venezuela en el que señaló: "Los atentados a la libertad de expresión y de prensa son parte del deteriorado contexto social e institucional de lo que ocurre en el país. Han cedido todos los elementos esenciales de la democracia. El periodismo independiente y la fuerza modeladora de la opinión pública se encuentran fracturadas, imponiéndose un totalitarismo comunicacional de Estado. Se trata de una tiranía ejercida y compartida por el presidente Nicolás Maduro Moros y el titular de la Asamblea Nacional, capitán Diosdado Cabello".
El reporte también señala que el Instituto Prensa y Sociedad certificó que se habían registrado ese año "287 violaciones al derecho a la libertad de expresión, entre agresiones a periodistas, criminalización del trabajo de la prensa y limitaciones del acceso a la información. De las 287 violaciones ocurridas, 237 afectaron a medios privados, 14 a medios extranjeros, 11 a medios estatales, especialmente en Caracas, el estado Táchira que es frontera con Colombia y los estados Aragua, Monagas y Carabobo".
En declaraciones registradas por la plataforma opositora Unidad, el director del diario, Eduardo Alemán, manifestó que 300 trabajadores amanecieron con una "inmensa tristeza y angustia”. "En toda mi vida no había afrontado una situación así. Personas que han dedicado toda su vida al periódico, pierden su trabajo. Estamos esperando. Algunos se quedarán en la plataforma mediática y otros lamentablemente tendrán que dejar de trabajar. Los trabajadores están solidarios, quieren a su periódico", apuntó.

