Los hospitales franceses guardaron este miércoles un minuto de silencio en memoria de la enfermera asesinada en el hospital universitario de Reims (noreste) por un individuo con problemas psicológicos.
Carène Mezino, de 37 años, fue apuñalada en el pecho con un cuchillo por un hombre de 59 años el lunes en el vestíbulo del hospital donde trabajaba, un ataque en el que también resultó herida una secretaria médica del mismo centro.
A pesar de los esfuerzos de los médicos, la enfermera murió en la madrugada del martes.
El agresor fue detenido inmediatamente y se enfrenta a los cargos de asesinato de la enfermera y tentativa de asesinato por la secretaria médica, según anunció el fiscal encargado del caso.
Los hospitales franceses han respetado un minuto de silencio hoy, en honor a la víctima, al que se han unido la primera ministra, Élisabeth Borne, y el titular de Sanidad, François Braun, en el hospital Georges Pompidou de París.
”Ser sanitario es una vocación, un compromiso para proteger, sanar y salvar. Es el servicio a los otros y el cuidado cotidiano”, afirmó Borne en el acto de homenaje, donde recordó a Carène Mezino como una sanitaria con “energía, dulzura y profesionalismo”, y expresó sus condolencias a su familia, sus dos hijos, sus amigos y colegas de profesión.
”Toda la comunidad de sanitarios está en duelo, todo nuestro país tiene el corazón roto”, añadió.

