SANTIAGO DE CHILE, Chile (dpa). -Las fuerzas armadas chilenas buscan los restos de los pasajeros del capotado avión CASA 212 con apoyo de un robot submarino y datos de videntes, informó desde el archipiélago Juan Fernández el ministro de Defensa, Andrés Allamand.
"Hemos recopilado toda la información que fluye en redes sociales, y en algunos casos corresponde a personas que tienen capacidades llamadas psíquicas (...) tenemos por esas personas el mayor respeto", dijo.Allamand, que sufrió la pérdida del hermano de su pareja en el accidente, el empresario Felipe Cubillos, subrayó que el gobierno usará todos los recursos posibles en el rescate.
"Sé por experiencia propia lo que sienten las familias. Ellos quieren que, aunque haya un mínimo indicio, una mínima posibilidad, una alternativa, una esperanza, que nosotros la verifiquemos", acotó.
De hecho, el fin de semana fueron encontrados restos desmembrados que deberán ser sometidos a pericias genéticas para su eventual identificación en el Servicio Médico Legal. Las fuerzas armadas, que desplegaron unos mil efectivos en la zona, enviaron otros siete aviones a colaborar en la búsqueda, además de un robot submarino que intentará ubicar el fuselaje de la nave.
No obstante, es probable que la misión fracase y que nunca se sepa por qué el avión cayó y se desintegró, en lo que fue el peor accidente aéreo en Chile en 30 años, admitieron las autoridades.
"Las posibilidades de saber con certeza qué ocurrió son bastante escasas", reconoció el secretario general de la Fuerza Aérea Chilena (FACH), general Maximiliano Larraechea." (El avión) tenía combustible para hacer por lo menos diez intentos de aterrizaje, o para quedarse esperando a que bajara el viento", explicó.Larraechea, jefe operativo del rescate, salió así al paso a versiones de que el avión era pilotado por personal sin experiencia y que tenía sobrepeso.
"Estamos hablando de alguna falla de material, del efecto del viento, de algún error de la piloto, o de una mezcla de todo lo anterior", insistió. La tragedia, ante la cual el gobierno declaró dos días de duelo nacional, provocó además la suspensión de la jornada de protestas convocada para este jueves por escolares y universitarios, en huelga hace tres meses.
"Somos respetuosos de la conmoción ante la tragedia", aseguró la presidenta de la Federación de Estudiantes de la Universidad de Chile, Camila Vallejo.