Hijo y prominente educador de la ciudad de Las Tablas, Manuel María Tejada Roca nace en un hogar formado por Manuel de Jesús Tejada y María Isabel Roca. Contrajo nupcias con doña Juana E. Mora Terrientes. Fruto de esa unión nacieron sus hijos Ramón Eugenio, Manuel María, Guillermo Augusto, María Isabel, Corina Pastora, Gustavo Adolfo, Elsy Raquel, Juan Antonio y Juana Eloísa. A sus 27 años de edad M.M.T.R. inicia su primer paso como educador consagrado, recibiendo el diploma que lo acreditó como maestro de primera enseñanza, siendo así el primer maestro tableño en obtener este título.
Debido a su profundo sentido de solidaridad y compromiso social para con sus coterráneos, escribe una carta al entonces presidente Dr. Belisario Porras con la intención y esperanza de recibir una subvención para la Orquesta de Las Tablas. La Orquesta Sinfónica Nacional, que hoy conocemos, fue fundada en 1941, ya para ese entonces, en 1915, nuestro querido pueblo de Las Tablas gozaba el privilegio de tener su propia orquesta.
El maestro Tejada Roca comprometido con la enseñanza pública, impulsa junto con otros seis miembros notables de la comunidad la creación de una junta urbana, que entre sus objetivos laudables consideraba fundar una escuela nocturna para adultos con nexos de biblioteca y conferencias públicas, una iniciativa apoyada por la fórmula simbiótica comunidad-gobierno.
Un grupo de personas ilustres de la ciudad de Las Tablas, preocupados ante la falencia de un director de escuela de dicha cabecera provincial, realizan una propuesta a la Secretaría de Instrucción Pública, hoy llamada Meduca, con el fin de que el estudiantado recibiera el influjo benéfico del enfoque educativo del maestro Tejada Roca como director de dicho plantel, ya que era reconocido como un forjador de instrucción y comprometido con la educación integral en su comunidad, así como lo fue en otras comunidades a lo largo y ancho de la Nación.
Su labor educativa no solo se circunscribió al aula de clases, sino que promovió la cultura popular en las comunidades interioranas, en donde luchó por el asentamiento de valores cívicos y morales. A sus 38 años, debido a su apostolado en la educación integral, creyente de la socialización de la enseñanza, la coeducación, la reivindicación del trabajo manual y la proyección de la escuela en las comunidades, ofrece gratuitamente sus servicios como educador para el Primer Año Normal de Las Tablas, permitiéndole recibir elogios del inspector general de Enseñanza de ese entonces, José Dolores Moscote, quien lo califica en su carta como un verdadero patriota, un educador desprendido y abnegado.
En el marco del 75º aniversario de fundación del Colegio Manuel María Tejada Roca de la ciudad de Las Tablas y en homenaje póstumo de mi bisabuelo, como un ejemplo de abnegación y sacrificio en pro de la juventud panameña, agrego valor a estas cortas palabras con una de mis frases favoritas, dichas alguna vez por el gran escritor inglés Edmund Burke: “La educación es la mejor defensa de las naciones”.
El autor es ingeniero