ECONOMÍA

El ocaso del dinero ‘contante y sonante’: John A. Bennett N.

El ocaso del dinero ‘contante y sonante’: John A. Bennett N.
El ocaso del dinero ‘contante y sonante’: John A. Bennett N.

Leo que los bancos europeos están incrementando sus controles a los capitales, al tiempo que el dinero en efectivo se torna en un obstáculo a las tradicionales y ladinas políticas monetarias de las bancas centrales; y todo ello hace surgir la posibilidad de abolir por completo el uso de dinero en efectivo. ¿Qué hay detrás de todo esto? Para mí, que he seguido el drama, creo que estamos viendo el desenlace de disparatadas políticas de intervención económica en lo ajeno; es decir, en el dinero de la gente, que no le pertenece al rey ni a sus lacayos. Ahora, cuando se encuentran con la posibilidad de colapsos económicos generalizados, corren como gallinas espantadas ante la sombra de gavilanes que revolotean. Pero vemos lo que ocurre, ya que los banqueros centrales buscan soluciones que no hacen gracia alguna a los dueños del dinero.

Comencemos por señalar que todo esto es parte de la realidad de los cambios que estamos viviendo en todo el mundo. Así, vemos que algunos países, tales como los escandinavos, ya se han convertido en economías sin contante y sonante. Pero las poblaciones de otros países, por razones de idiosincrasia, se oponen. Y está el caso de los alemanes, que vivieron la brutal experiencia de la gran hiperinflación de 1920, cuando el costo en marcos alemanes de una postura de gallina pasó de un marco a más de un millón de marcos, en una época en la que el cambio entre marcos y el dólar estaba 7 a 1. Otros países jamás han vivido esas experiencias traumáticas que hicieron perder a muchos sus fortunas, grandes y chicas.

En Panamá, por ejemplo, ya no puedes llegar al banco con una maleta llena de billetes alegando que alguien te compró la finca. Incluso me preguntaron hasta el nombre del perro de mi casa cuando fui a depositar un cheque del mismo banco, por 10 mil dólares. Detrás de todo ello está, entre otras cosas, la guerra contra el terrorismo; pero…¿de cuál terrorismo hablamos? ¿Acaso no es terrorismo cuando un gobierno juega con el dinero de sus ciudadanos y causa una inflación como la señalada en Alemania o las que hemos visto en Argentina, Brasil y tal? Y, ¿qué pasa cuando vemos a políticos que llaman “señoreaje” a ganancias obtenidas con la acuñación monetaria? En otras palabras, creer que el señor o rey se merece eso y mucho más, para luego salir a despilfarrar. A fin de cuentas, lo que estamos presenciando es otra movida mucho más profunda, mediante la que los gobiernos buscan afanosamente controlar la economía de sus ciudadanos, tal como lo dictamina la Constitución de Panamá en su capítulo X. Entonces, lo que vale es examinar las motivaciones subyacentes. ¿Podemos hablar de “amor al prójimo”?

En síntesis, lo que estamos viendo es el ocaso del sistema monetario fiat o de confianza. Yo te fío, tú me fías, él te fía; pero, a final de cuentas, nadie confía. Todo ello también debemos verlo a la luz del absurdo programa en Estados Unidos, que yo denomino: “relajo cuantitativo”, con el que se pretendía estimular la economía y lo que estimularon fue la deuda. Y ni hablar de las distorsiones que todo ello produjo en los mercados de capitales, que ahora constituyen obstáculos infranqueables a la normalización de las tasas de interés. Incluso algunos bancos juegan con la idea de crear tasas de interés negativas, algo imposible con el contante y sonante, ya que los depositantes preferirían sacar su dinero y guardarlo debajo del colchón. De pronto veríamos el resurgir de las bóvedas de dinero.

A fin de cuentas, los metiches gubernamentales olvidan que el dinero es de naturaleza no coercitiva, como señalara Carl Menger cuando explicaba la razón por la que algunos productos se convertían en dinero, tal como el oro o hasta el cacao. Hoy día surgen dineros virtuales: bitcoin, peercoin, ripple, litecoin, dogecoin, y otros. Y, por otro lado, no vemos que el verdadero lavado no se hace por intermedio del contante y sonante, sino a través de otros mecanismos muy sofisticados. Es ridículo verles poniendo retenes viales al chico, mientras los grandes pasan por encima en sus helicópteros.

Lo que le debe importar a la gente común es ver la manera de separar la política o politiquería del dinero. Tú juega tu porquería por allá, pero no te metas con el producto de mi trabajo. Es evitar que los políticos corruptos sigan destruyendo los ahorros de toda una vida de trabajo, mediante sus esquemas inflacionarios y tal. En síntesis, el contante y sonante no es la finalidad económica, sino el medio indispensable para ejercer nuestros derechos fundamentales de propiedad del fruto de nuestro ingenio y trabajo. Pero, que siga el relajo, pues ello mismo dará lugar al surgimiento del bypass económico a los corruptos metiches centrales.


LAS MÁS LEÍDAS

  • Gobierno contrata a multinacional estadounidense para diseñar el quinto puente sobre el Canal. Leer más
  • Cuarto Puente sobre el Canal de Panamá: así será el Intercambiador del Este en Albrook. Leer más
  • Denuncia ante el Ministerio Público frena contrato millonario de piscinas que firmó la Alcaldía de Panamá. Leer más
  • Días feriados y fiestas nacionales en Panamá 2026: Calendario detallado. Leer más
  • Grupo Cibest acuerda vender Banistmo en Panamá a Inversiones Cuscatlán. Leer más
  • Trasladan a la directora del Cefere por el caso de La Parce. Leer más
  • Ministerio Público investiga presunta corrupción en el otorgamiento de trabajo comunitario a La Parce. Leer más