“Una de las bases de la sociedad democrática es que las personas puedan hablar sin miedo”, nos recuerda el académico Jordi Nieva Fenoll. Esa frase resuena hoy con más fuerza que nunca. En un mundo saturado de ruido y manipulación, la libertad de expresión sigue siendo el pilar que sostiene la crítica, la prensa libre y el pensamiento incómodo. El reciente fallo de la Corte Suprema que exonera a La Prensa tras casi dos décadas de litigio civil confirma que informar no es delito, y que incluso las figuras públicas deben tolerar el escrutinio si queremos preservar la democracia. Pero la libertad no basta con ejercerla: hay que protegerla. Como advertía Voltaire, la defensa del derecho a decir lo que pensamos —aunque moleste— es inseparable del progreso ilustrado. Las redes sociales, con todo su caos, no determinan las agendas ni las verdades, pero sí ponen a prueba nuestra capacidad de discernir. Como bien apunta Nieva: “La respuesta a la desinformación no es solo más información, sino mejor formación”.
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Hoy por Hoy: sin miedo a expresarse
01 ago 2025 - 05:00 AM

