ESTRELLADO. Al canciller Javier Martínez Acha le han cancelado la cita con el secretario de Estado, Marco Rubio, que supuestamente debía celebrarse la otra semana en Washington. Tal vez Rubio quedó con pocas ganas de repetir, luego de los desencuentros de febrero pasado. O simplemente la cita nunca estuvo agendada y confirmada con semanas de anticipación, como pensaba el canciller. En todo caso, parece que alguien en la embajada no hizo bien su trabajo. Pero el embajador “rock star”, en lugar de dar la cara y atender sus obligaciones, se fue a Japón. ¿Hasta cuándo piensa el Gobierno seguir apadrinando a funcionarios que ponen en juego nuestras relaciones internacionales?
INN. Así como en la jurisdicción civil se puede llevar un caso a un juzgado o a un arbitraje, ahora, en el ámbito penal, también se puede elegir: un delincuente común puede presentarse ante un juez o huir a la embajada de Nicaragua. La sede diplomática debería hacer lo mismo que en los arbitrajes: publicar sus tarifas. Así, el prófugo de turno podría escoger hospedarse en la habitación estándar o en el plan VIP, con derecho a jacuzzi, hamaca y barbacoa. Y, además, es pet friendly.
ARRIENDO. Ahora resulta que el Suntracs le pagaba $22,000 al Conusi por el alquiler de un inmueble comercial. Y ese local tan costoso, ¿dónde estaba ubicado? ¿En Multiplaza? Ojalá ese arriendo no sea una excusa para transferir fondos con fines sindicales muy específicos a otra organización gremial.
VETO. El presidente de la República devolvió a la Asamblea, sin sancionar, un proyecto de ley que buscaba la reelección inmediata del defensor del Pueblo. Mulino advirtió que eso riñe con la Constitución, que permite un único mandato de cinco años. La propuesta también pretendía repartir “bonificaciones” entre el personal, crear la “carrera defensora” y facultar al defensor para intervenir como “amigo del tribunal” (amicus curiae, como se le conoce en el derecho internacional) en los procesos judiciales, sin autorización del tribunal competente. El proyecto objetado fue preparado por el actual defensor Eduardo Leblanc y presentado por Camacho. Con razón.

