Una investigación disciplinaria y otra penal dieron inicio ayer las autoridades del Ministerio Público, tras el hallazgo el pasado miércoles de 16 kilos de cocaína dentro de un vehículo que estaba en el estacionamiento de ese organismo.
En estas investigaciones tendrán que rendir declaraciones todos los funcionarios que tuvieron participación en la instrucción del expediente relacionado con el decomiso de dicho carro, entre estos el fiscal primero de Drogas, Javier Caraballo, según informó el procurador suplente, Giuseppe Bonissi.
A pesar de que Caraballo fue enviado ayer de vacaciones por siete meses -que tenía pendientes-, Bonissi negó que haya alguna acusación directa contra el fiscal por este caso.
Se informó que Ida Mirones, secretaria de la Fiscalía de Drogas, reemplazará a Caraballo en el cargo.
El carro fue incautado a finales de junio de este año y en la primera revisión que se le hizo fueron hallados 60 kilos de cocaína. La Policía detuvo a sus dos ocupantes en aquella ocasión.
Bonissi indicó que este no es el primer incidente en el que un carro implicado en casos de droga es enviado al Ministerio Público y tiene todavía narcóticos en el interior. Como ejemplo citó un caso ocurrido recientemente en Chiriquí, donde se halló dinero en un automóvil que había sido revisado previamente por las autoridades antidrogas.