Un total de 11 mil 472 casos de picadura de alacrán –también llamado escorpión– ha registrado el Ministerio de Salud (Minsa) entre 1999 y 2009 en el país. Coclé y Panamá son las provincias con mayor incidencia de casos (ver tabla).
Según estadísticas de la Contraloría General de la República disponibles a la fecha, hubo 23 defunciones entre 1998 y 2006.
La víctima más reciente –de noviembre de 2009– fue un menor de tres años de la comunidad de Bisira, distrito de Kankintú, en la comarca Ngäbe Buglé. Esta es la segunda ocasión en que la familia Ábrego pierde un infante por igual causa.
En el Hospital del Niño, el promedio anual de infantes picados por alacranes es de 38 casos, aunque en 2007 esa cifra se elevó a 116.
En 2008 ingresaron 63 pacientes, cuyas edades van de un mes a 14 años. Para entonces, no se reportaron defunciones, detalló Luis Coronado, médico pediatra de este centro.
Hasta octubre de 2009, en tanto, hubo 43 pacientes. El grupo más afectado en la población pediátrica es el de uno a cuatro años, reveló.
Explicó que estos datos corroboran la necesidad de educar a la población sobre las precauciones que debe tener frente al alacrán, y cuidar el entorno para que este arácnido no desarrolle su hábitat en el del ser humano.
