Amael Acosta, prófugo de la justicia desde hace seis meses por su supuesta vinculación con la muerte de Vanessa Márquez, ocurrida en marzo de este año, canceló sus tarjetas de crédito dos meses después de ocurridos estos hechos, burlando el bloque de búsqueda creado para su captura.
Así lo informó ayer Benito Mojica, abogado de los familiares de Márquez, quien aseguró que esta evidencia se encuentra en el expediente de este caso que se instruye en la Fiscalía Tercera Superior.
Fuentes del Ministerio Público certificaron que la ex fiscal Argentina Barrera, antes de dejar su cargo, había pedido la verificación de toda la información relacionada con la utilización de las tarjetas de crédito de Acosta, pero hasta el 29 de agosto pasado no había respuesta.
Tras ordenarse su detención, informes policiales revelaron que Acosta había sido visto en Antón, provincia de Coclé, aunque esto no ha sido comprobado.
Luego, a través de Interpol, se obtuvo otra información más reciente que revelaba que Acosta se encontraba en Costa Rica, pero esto tampoco ha podido ser confirmado.
Mojica dijo que se tiene previsto realizar una serie de diligencias en este caso por parte del recién nombrado fiscal tercero superior, Guillermo Villalobos.
Se ha ordenado la práctica de pruebas de ADN a los hombres que participaron de la fiesta en la que estuvo Márquez antes de su muerte, el pasado 3 de marzo.
Esta diligencia fue pedida tras encontrarse en el cadáver de la joven un vello púbico que no le pertenecía.
Una serie de careos, análisis sicológicos y una reconstrucción, son otras acciones que se realizarán dentro de este caso.
Yanibeth Sarmiento, una dominicana, es hasta el momento la única detenida por este caso. Acosta está prófugo y los demás asistentes a la fiesta no han sido vinculados.

