Las constantes lluvias en el país no solo han tenido consecuencias económicas y sociales, sino también ambientales. El emblemático cerro Ancón, en la ciudad capital, ha tenido deslizamientos de tierra durante estas dos últimas semanas, que incluso han provocado la caída de varios árboles.
De al menos cincos deslizamientos que se han dado en distintas partes del cerro, tres han sido a lo largo de la carretera que llega hasta la cima de la reserva natural.
Los deslizamientos y los árboles caídos bloquearon parcialmente la vía. El Sistema Nacional de Protección Civil (Sinaproc) estuvo en el lugar, durante el fin de semana, para cortar las ramas de los árboles caídos.
Por su parte, la Unidad Administrativa de Bienes Revertidos del Ministerio de Economía y Finanzas ha estado removiendo la tierra con una retroexcavadora. Labores que ayer seguían realizando.
Rosina de Stec, residente de Quarry Heights, contó que en varias noches se escuchó el ruido que ocasionaban los deslaves y el desprendimiento de las rocas. Para ella, es claro que la topografía del cerro es frágil.
Los deslizamientos de tierra no han llegado a la zona de las viviendas, pero el temor de los residentes es que si las lluvias continúan, los desprendimientos pueden ser mayores.
Desde el área de La Boca son evidentes los espacios dejados por los deslizamientos en medio del bosque, algunos hasta alcanzan unos siete metros de diámetro.
El Sinaproc hará una inspección hoy para evaluar las afectaciones, informó el Departamento de Relaciones Públicas de la entidad.
