Cuando Enilda Rivera asumió el cargo de directora titular del colegio secundario Cristóbal Adán Urriola de Arraiján estaba preparada.
Como parte de sus créditos poseía un técnico en administración de empresas. El curso no lo tomó para dirigir un colegio, pero reconoce que en los últimos 18 meses le ha servido para gerenciar el plantel.
Sin embargo, no todos los docentes que abandonan el aula de clases para administrar un colegio tienen la formación adecuada. La mayoría aprende con la práctica y otros renuncian. "Comprenden que no les gusta el trabajo y prefieren regresar a los salones de clases", dijo ayer Gizka de Bernier, subdirectora técnica docente de la Dirección General de Educación.
El rol fundamental de los directores en los colegios es uno de los temas que se analizarán esta semana en el Segundo Encuentro Regional sobre Formación de Asesores Pedagógicos, donde participan además de los países del área, Belice y República Dominicana.
Marvin Herrera, secretario general de la Cooperación Educativa y Cultural Centroamericana, dijo que en los países de la región todos coinciden en que se necesita de un mecanismo de formación inicial de directores.
Ello implica, por ejemplo, tener un director que sepa de administración educativa, legislación escolar y gestión de trabajo comunal.
En la reunión además se compartirán las experiencias de directores de colegios de otros países con miras a mejorar la calidad educativa.

