FICCIÓN. En varias películas vemos cómo una persona atrapada en arenas movedizas se hunde hasta desaparecer, o por lo menos hasta ser salvada en último momento por un amigo o una rama.
La verdadera naturaleza de las arenas movedizas está muy exagerada, ya que son arenas que han perdido su capacidad de soportar peso porque están saturadas de agua y por ello han adoptado las características de un líquido. Cuando una persona cae en este tipo de terreno, comienza a hundirse pero la suspensión de arena y agua tienen una densidad superior a la del cuerpo y éste no llega a sumergirse del todo.