Los cargamentos de droga y dinero provenientes del narcotráfico internacional descubiertos recientemente en la isla de Achutupu, en la comarca Kuna Yala, son apenas la punta de un iceberg que se asoma y amenaza con generar una crisis masiva en toda esa desolada región indígena del país.
Informes recopilados por la Fiscalía de Drogas de Colón y Kuna Yala, revelan que desde hace más de 10 años los pobladores de muchas de las islas de la comarca trafican con cargamentos de cocaína y marihuana que han descubierto después de que narcotraficantes colombianos los ocultan o abandonan en los propios islotes o en altamar en su afán por llevarlos al norte.
Según estos informes, algunos de los sailas -autoridades tradicionales kunas- están implicados o son cómplices indirectos de las redes que trafican. Inclusive, se tiene conocimientos de reglas no escritas, en algunas comunidades de las islas, que obligan a los indígenas que encuentran los cargamentos a pagar un "impuesto" a los sailas, que oscila entre 200 y 600 dólares.
El fenómeno del narcotráfico aumenta en Kuna Yala mientras la presencia policial es coyuntural e, incluso, rechazada por la población. El abandono estatal y lo vasto del territorio hacen el resto.
Vea Las pacas que traen las olas del mar

