Luego que la junta directiva de la Autoridad Marítima de Panamá (AMP) decidiera bajar la tasa que cobra por control de contaminación la empresa Ocean Pollution Control (OPC) a cada barco que llega a Panamá, surgieron nuevos elementos que complican el caso.
Este diario obtuvo copias de cheques con los que la empresa OPC pagaba, al menos, a 10 funcionarios de la AMP. El administrador de la institución, Roberto Linares, dijo que ya estaba al tanto de la información y que ha procedido a investigar.
Las cifras de los cheques oscilaban entre 300 y 700 dólares (ver documentos en página 4A).
OPC se abstuvo de dar explicaciones, pero el ex administrador de la AMP y actual asesor de la empresa, Fernando Solórzano, dijo que todo se debió a un acuerdo de cooperación firmado con la compañía.
Solórzano aseveró que son funcionarios adscritos a la AMP, algunos con funciones técnicas y otros simplemente de secretariado.
También aclaró que todo se firmó durante la administración de Rubén Arosemena. Este diario buscó la versión de Arosemena, pero no se lo pudo contactar.
VEA OPC, una empresa siempre en polémica
