Las condiciones de los parques capitalinos decaen drásticamente, a medida que se alejan del centro de la ciudad.
Mientras el parque Andrés Bello, en la Vía Argentina, cuenta con canchas independientes de fútbol y baloncesto, en el sector cuatro de la comunidad 24 de Diciembre, al este de la ciudad, los niños deben elegir uno de los dos deportes.
Para el arquitecto urbanista Álvaro Uribe, esta realidad es un reflejo de la iniquidad social con que ha crecido la ciudad capital por falta de una planificación y de una buena administración de los espacios urbanos.
“Los problemas de infraestructura que se encuentran en el centro de la ciudad se multiplican en las periferias”, agregó.
La Alcaldía capitalina administra 315 parques clasificados en recreativos, comunales e infantiles, en los que anualmente invierte un millón 450 mil dólares en mantenimiento.
Concepción Chávez, subgerente de Ornato y Medio Ambiente del Municipio de Panamá, reveló que de los 315 parques que existen en los 21 corregimientos del distrito capital, 150 se encuentran en mal estado.
La nueva administración municipal alega haber encontrado parques deteriorados, sucios, llenos de hierba, sin luminarias y con las bancas y juegos de niños dañados.
Por ello, informaron, se invertirán 30 mil dólares para reparar y darle mantenimiento, lo que representa un promedio de 200 dólares por cada uno de los 150 parque en problemas.
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