Es el hombre que parrandea en San Miguelito, reparte becas en el interior, besa a niños y les estrecha la mano a los campesinos. Todavía no es un candidato presidencial, ni siquiera lo admite, pero el primer vicepresidente y canciller, Samuel Lewis Navarro, tiene la fortuna de caminar sobre alfombra roja, a 20 meses de los comicios electorales.
Este empresario millonario es uno de los más cercanos al presidente, Martín Torrijos, lo que le facilitó ser el orador de fondo en los actos para conmemorar la muerte del general Omar Torrijos, organizados por una fundación que aglutina a los miembros del gobernante Partido Revolucionario Democrático, que se abocan a la renovación de los dirigentes.
Como primer Vicepresidente de la República puede encabezar cualquier actividad del gobierno –tarea que realizó durante las vacaciones de Torrijos–, pero el Tribunal Electoral determinó que no podrá hablar de política en horas laborables, ya que prevalece más su condición de Ministro de Relaciones Exteriores.
Según la última encuesta de este diario (julio), realizada por la consultora Dichter & Neira, Lewis Navarro figura de quinto, casi en el sótano, en la lista de preferencias de los posibles candidatos del gobierno con el 1.3%. La lista la encabeza la ministra de Vivienda, Balbina Herrera, con el 26.8%, seguida del alcalde de Panamá, Juan Carlos Navarro, con el 19.7%.
Tanto el canciller Lewis Navarro como su primo hermano Juan Carlos Navarro, quien también tiene aspiraciones de llegar al Palacio de las Garzas, han intensificado sus visitas a diferentes comunidades del interior del país.
El alcalde capitalino ha participado como abanderado de las fiestas patronales y de fundación en Gualaca, David, Santiago, Soná, Alanje y Natá. Ayer, por ejemplo, fue abanderado de una cabalgata en Panamá Viejo.
Además, se reúne constantemente con los alcaldes y los representantes de corregimiento, a propósito de la descentralización municipal.

