En San Joaquín no hay quien no hable de la falta de buses. Se comenta en la tienda del chinito, afuera de la escuela, en "las multi", y en los portales de las casas.
Son 15 mil personas las que, según la junta comunal del sector, están afectadas desde el pasado jueves, cuando los buses de Pedregal dejaron de entrar al barrio porque uno de los 150 choferes que trabaja en la ruta fue agredido por un habitante del sector.
La cantina La Pedregaleña, en la vía principal y hasta donde los lugareños tienen que desplazarse para tomar un bus, ahora es testigo de los lamentos de los usuarios. Algunos tienen que caminar hasta 4 kilómetros para llegar hasta allí, otros recurren al poder del grupo y pagan un taxi entre todos para salir del lugar.
PERJUDICADOS
Elvia Araúz, de 72 años y con 30 de vivir en Pedregal, perdió ayer su cita en la Caja deSeguro Social, porque no tuvo cómo salir del barrio. Mientras compraba algunos vegetales en la abarrotería Julissa, aseguró que, a pesar de las incomodidades, apoya el paro porque, según ella, "es la única forma de que la Policía venga a ponerle un alto a los maleantes".
El señor Cortez, un agente de ventas que depende de los buses para desplazarse, fue uno de los que ayer caminó los casi 4 kilómetros para llegar hasta La Pedregaleña. Está preocupado. Tiene una hija que trabaja en Calle 50 hasta las 11:00 p.m. y ayer llegó a su casa en San Joaquín a la 1:00 a.m. porque casi no consigue un taxi.
En las calles hay una tensa calma y zozobra. Los lugareños piden más seguridad para el barrio que en los últimos años ha estado a merced de los atracos, del pandillerismo y de los robos a residencias, a tal punto que pocas son las viviendas que no tienen rejas. Pese al nefasto panorama, Leticia Ortega, de 72 años y una de las gestoras de San Joaquín, defiende al barrio que vio nacer el 18 de noviembre de 1977. Asegura que Leonel Broce, presidente de la piquera de Pedregal, les quería quitar los buses "desde hace rato". "Eso de la seguridad es puro cuento, porque aquí hay más gente buena que mala", dijo. "El que más gana por aquí, devenga 500 dólares, ¿cómo va a hacer para pagar un taxi todos los días?, se preguntó.
PELIGRA JORNADA ESCOLAR
Es solo el comienzo. La peor cara del asunto mostrará sus matices el próximo lunes 12 de marzo, cuando los 900 estudiantes del Centro Escolar Ascanio Villalaz retornen a clases. Los docentes José Manuel Munive, Cristino De León y el director Jorge Ureña advierten que el inicio de la jornada escolar se podría entorpecer por la falta de transporte colectivo. No es para menos. Según cálculos de la dirección, 300 de los 900 estudiantes viven en Mañanitas, Juan Díaz y Tocumen, y dependen de los buses para llegar hasta el centro educativo.
Y qué decir de los propios maestros, de los 67 que laboran en el plantel, si acaso 10 dijeron tener vehículo. Los demás tienen que andar en bus. Ayer, por ejemplo, De león tuvo la suerte de encontrarse con una de sus colegas en la vía principal y con otras dos personas le pagaron un dólar a un taxi para que los llevara al colegio. Minutos antes, un taxista les intentó cobrar 1.25 dólar por persona para transportarlos hasta San Joaquín. "Ya empiezan a especular con los precios", dijo el profesor.
No es la primera vez que el Centro Escolar Ascanio Villalaz tiene problemas. El pasado 27 de febrero "los amigos de lo ajeno" entraron en las horas de la noche y se robaron el aire acondicionado de una de las aulas que se iba a inaugurar en los próximos días. En épocas pasadas se llevaron los grifos de los bebederos, los cables de la luz y hasta algunas sillas.
HABLA BROCE
El presidente de la piquera de Pedregal, Leonel Broce, asegura que el paro es indefinido.
"No vamos a arriesgar la vida de los conductores en el área y no regresaremos a prestar el servicio hasta que se les garantice la seguridad", dijo.
El dirigente agregó que los conductores se reunirán el lunes con las autoridades de Tránsito para saber si retornan o no al área. "Serán los propios conductores los que decidirán si vuelven", aseguró.
Javier Líder, representante del corregimiento, mientras tanto, dijo que el lunes firmarán un convenio con la Policía Nacional (PN) para reforzar la seguridad en el área, a fin de que los conductores de la ruta de Pedregal vuelvan a prestar el servicio en el barrio.
Y del hombre que atacó al conductor, poco se sabe. La PN, a través de un comunicado, manifestó haber capturado a Christopher Antuán Hurtado, de 18 años, quien intentó robar a otro conductor en la madrugada de ayer y se investiga si tiene relación con el hecho del pasado jueves.
