Una excesiva especulación en el mercado inmobiliario reveló el inversionista Ramón Ricardo Arias, de la Inmobiliaria San Felipe, S.A., lo que, sostiene, refleja una tendencia alcista y excluyente para quien busque ubicarse en el centro histórico de la ciudad.
Arias dijo que el aumento es tal que tan sólo en 10 años el precio del metro cuadrado de tierra restaurable subió de 70.00 balboas en 1995 a 300.00 balboas en 2005. Esto, dijo, significa un incremento del 328% en una década.
Su análisis fue expuesto en el reciente taller sobre viviendas y sostenibilidad social en sitios históricos protegidos, auspiciado por la Oficina del Casco Antiguo, UNESCO y la Fundación Panamá Viejo.
Arias reveló que las nuevas tendencias hacen fluctuar el alquiler mensual de un apartamento en dicha área histórica entre 275 y 800 balboas. Después de emitida la Ley 9 de 1995 para la puesta en valor del Casco Antiguo, la restauración practicada es de "caparazón", es decir, se restaura la fachada para conservar la arquitectura, pero en el interior se crean espacios nuevos.
Además, indicó que las restauraciones que se hacen son parciales, aunque la tendencia es de radicarse en residencias más grandes, pero el costo se eleva para aquellas que tienen vista al mar o gozan de proximidad a una plaza.
En las residencias restauradas los precios se disparan. Para la venta, el metro cuadrado residencial es de mil 100 balboas; el comercial, mil 300 balboas. Para alquilar, el residencial cuesta 7.00 y el comercial, 9.00 balboas.
En materia de viviendas de mediano costo, Arias reveló que hay apartamentos cuya mensualidad llega a 600 balboas, como en el restaurado Edificio Kardonski, de Calle 12 y Avenida Central. Sin embargo, a la fecha no se han concretado proyectos de viviendas de bajo costo, ya que ni bancos ni inversionistas muestran interés en ello.
No obstante, haciendo cálculos conservadores, precisó que una vivienda de bajo costo para la venta estaría en 450.00 balboas el metro cuadrado y para alquiler 2.50 balboas el metro.
De constituirse en un condominio, el canon mensual oscilaría entre 80.00 y 90.00 balboas y su precio de venta sería de 22 mil balboas.
Por otro lado, las tendencias dan cuenta de que la profusión de extranjeros en el Casco Antiguo es notoria desde hace un par de años y con ello el interés por adquirir casas y propiedades. Entre 50% y 60% de las ventas se hacen a extranjeros, reveló Arias.
Algunos buscan seguridad y economía, como parejas de retirados estadounidenses atemorizados por los ataques terroristas; otros especulan (se sabe que hay dos empresarios que han acaparado entre 20 y 30 edificios condenados), mientras que existen compañías que llegan para hacer negocios.
Según Arias, hace dos años el 30% de las propiedades restauradas se advertía vacío. Actualmente, ello se ha reducido en 10%.
Situación del Casco
Según el director de la Oficina del Casco Viejo (OCA), Ariel Espino, el 25% de los inmuebles está condenado; el 52% alquilado; el 17% abandonado y sólo el 3% es de uso propio. La reactivación del Casco Viejo se observa con mayor ímpetu en las Calles 1a. y 2a.
Actualmente existen 940 propiedades en el Casco, que se reducen a 767 inmuebles, de los cuales 105 (11%) están en condición ruinosa. A ellos se suman 79 que yacen en muy mal estado.
La OCA ha calculado que ni el 10% de estos ha sido restaurado, ya que sólo se han rescatado 74.
Espino informó que la OCA se encuentra actualizando un informe sobre las propiedades, su situación y sus propietarios para proceder a deslindar responsabilidades en materia de reparación y restauración de inmuebles. El funcionario relató que su despacho ha debido realizar gestiones ante el Ministerio de Vivienda para reubicar familias ante el deplorable estado del caserón que ocupan y las condiciones infrahumanas que enfrentan con riesgo sanitario para toda la familia.
En materia demográfica, el Casco ha perdido en una década un tercio de su población (ahora tiene 6 mil 928 habitantes). Si bien la OCA tiene sumo interés en dinamizar el mercado inmobiliario en el área, el Estado no puede por ahora adquirir inmuebles para promover proyectos habitacionales de interés social.
En el área conocida como La Explanada, en las inmediaciones de la Plaza de Arango, el Banco Hipotecario Nacional cuenta con entre 30 y 40 edificios en que se podrían iniciar proyectos de bajo costo.
Sugerencia de UNESCO
Juan Luis Isaza, consejero de la Organización de Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) sugirió que los panameños revisen la ley de puesta en valor del Casco Viejo.
El Estado debe obligar a los propietarios, así como a los especuladores, a atender sus propiedades y a restaurarlas. De lo contrario, se debe utilizar el poder coercitivo, ya que no son conscientes de que deben invertir para reactivar sus caserones, al punto que la entrada al Casco proyecta una imagen de abandono y deterioro.
Según él, el Gobierno debe tratar de mantener a la gente que tradicionalmente ha residido allí, a menos que no pueda pagar por su vivienda. Pero esa gente debe ayudar a preservar este patrimonio histórico.
