Mari Carmen Aponte, embajadora designada de Estados Unidos en Panamá, aseguró que de ser ratificada en el cargo priorizará la lucha anticorrupción como parte de su agenda diplomática.
Aponte asistió el pasado miércoles 18 de mayo a una audiencia ante el subcomité para Asuntos del Hemisferio Occidental del Senado de Estados Unidos para exponer sus planes y responder preguntas sobre su nombramiento. Esto es parte del proceso de ratificación para cargos del servicio exterior de ese país.
Durante su discurso, aseguró que trabajaría de la mano con el personal de la embajada en Panamá para avanzar puntos clave, como migración y cooperación económica y comercial. Además, se refirió directamente a la lucha contra la corrupción, la cual, dijo, amenaza las bases de una democracia institucional.
“Debemos continuar con la promoción de la gobernanza y el estado de derecho. La corrupción, un serio desafío para Panamá, tiene un efecto corrosivo en muchas capas del Estado; no podemos dejar que progrese”, aseguró Aponte durante su comparecencia.
Anteriormente, Aponte sirvió como embajadora estadounidense en El Salvador, lo cual le dio pie para hablar de los desafíos de la región en su conjunto.
Durante la audiencia, también se refirió a los esfuerzos del gobierno panameño para fortalecer la transparencia financiera y mejorar las deficiencias que facilitan el lavado de activos. “Panamá también sufre de actividad ligada al crimen organizado, la cual amenaza las instituciones democráticas y la prosperidad económica”, dijo Aponte.
Lo planteado por la embajadora designada durante su intervención va de la mano con lo expresado por el secretario de Estado de Estados Unidos, Anthony Blinken, en suelo panameño durante su visita el mes pasado. Si bien la mayor parte de su tiempo en Panamá fue destinado a una reunión ministerial regional para tratar el tema de migración irregular, Blinken se reunió con miembros de la sociedad civil panameña que lideran la lucha anticorrupción en el país.
Durante la reunión, se trataron temas de transparencia, los mecanismos existentes para combatir la corrupción y el papel que juega Panamá en la lucha contra la debilidad democrática en la región y por fortalecer el estado de derecho. “La corrupción genera un cinismo entendible hacia el gobierno... es la fuente de muchos retos”, dijo en su momento. Aseguró que esa es una de las prioridades que tiene Estados Unidos al momento de colaborar con la sociedad civil panameña.
Durante su intervención en el Senado, Aponte reiteró que de ser confirmada buscará trabajar de la mano con variados sectores de la sociedad panameña para avanzar sus metas e intereses. Aponte, abogada nacida en Puerto Rico en 1946, fue designada en el cargo por el presidente estadounidense, Joe Biden en octubre de 2021.


