Personal de la Contraloría General mantiene abierta una investigación para determinar el manejo dispensado a los fondos en la Comisión Panamá-Estados Unidos para la erradicación y prevención del gusano barrenador del ganado (Copeg), según informaron fuentes oficiales.
Copeg, que tuvo su génesis en febrero de 1994 mediante un acuerdo de cooperación entre Panamá y Estados Unidos (EU), adquirió cinco años más tarde categoría de misión internacional al convertirse –ese convenio– en ley de la República en mayo de 1999.
Su tarea consistió en planear, diseñar, construir, equipar y operar una planta de producción de moscas estériles, y erradicar y prevenir su reinfestación por el gusano barrenador en Panamá, sin causar daño al medio ambiente.
Las actividades de esos acuerdos, según dispuso la ley, son ejecutadas por el Ministerio de Desarrollo Agropecuario de Panamá y el Departamento de Agricultura de Estados Unidos. El 90% del presupuesto de Copeg proviene de Estados Unidos y el 10% restante representa un aporte de Panamá.
Para 2007, el presupuesto de Copeg fue de 15.49 millones de dólares, de los cuales, 13.94 millones de dólares fue aporte de Estados Unidos.
El 12 de julio de 2006, Panamá fue declarado libre de la plaga y se inauguró la planta productora de moscas estériles que opera actualmente en Pacora, al este de la provincia.
MEDIDA
Pero una decisión "unilateral" de Estados Unidos, según señaló Luis Martínez, presidente de la Asociación Nacional de Ganaderos (Anagan), dio paso a una "reestructuración del programa" que no solo ha implicado, añadió, el envío de vacaciones a José Dimas Espinosa, director general de Copeg-Panamá, sino también la reducción del 50% del personal técnico que trabajaba en el campo.
"El programa fue muy exitoso con la erradicación del gusano barrenador, pero ahora el Estado panameño tiene que garantizar que Darién sea resguardada de la fiebre aftosa", dijo Martínez, quien es uno de los comisionados panameños en Copeg.
Fuentes cercanas a Espinosa aseguraron que esperará la conclusión de la auditoría para "presentar sus descargos".
En la Embajada de EU en Panamá prefirieron no hacer comentarios al respecto, debido a que "hay una investigación abierta" por parte de la Contraloría, dijo su vocero Gavin Sundwall. Sin embargo, comentó el compromiso de su gobierno de colaborar para "combatir la corrupción".
"Seguimos cuadrando con la Contraloría y estamos satisfechos con el avance logrado" en la investigación, aseguró.
