Para problemas globales, remedios globales. Más de 200 mil personas en el mundo caminaron ayer para ayudar a combatir el hambre en los niños.
Por segundo año consecutivo, el Programa Mundial de Alimentos (PMA) de las Naciones Unidas realizó caminatas en 72 países. A las 10:00 de la mañana de cada país empezaron las marchas de cinco kilómetros, lo cual permitió que –por el huso horario– hubiese gente caminando para combatir el hambre durante 24 horas.
Cada participante en las marchas podía hacer un aporte voluntario que será destinado a comprar comida para los niños que padecen hambre en el mundo. El primer país donde se llevó a cabo la caminata fue Auckland, en Nueva Zelanda.
En Panamá caminaron más de 400 personas en el área de Amador.
La distancia recorrida por cada uno de los 200 mil participantes en el mundo equivale a dar la vuelta al planeta 25 veces. Aunque ayer no se habían contabilizado las contribuciones, se adelantó que el dinero recaudado permitirá alimentar, por lo menos, a 50 mil niños durante un año.
Aunque en Panamá está la sede regional del PMA para Latinoamérica y el Caribe, los aportes recibidos en la caminata global no serán destinados a mitigar el hambre de los niños panameños, debido a que otros países están en peores condiciones, explicó el vocero de la entidad, Alejandro López-Chicheri. En Panamá, el 14% de los niños sufre de desnutrición, en comparación con, por ejemplo, el 50% de la población infantil de Guatemala, dijo López-Chicheri.
En América Latina, los países que reciben especial atención del PMA son Guatemala, Honduras, El Salvador, Nicaragua, Haití, Cuba, República Dominicana, Perú, Ecuador, Colombia y Bolivia.