El pleno de la Asamblea Nacional aprobó en segundo debate el proyecto de ley 432, que elimina la Autoridad para la Atracción de Inversiones y Promoción de Exportaciones (ProPanamá) como entidad autónoma y la integra al Ministerio de Comercio e Industrias (MICI). Ante los diputados, el ministro Julio Moltó, defendió la propuesta como una medida de modernización del Estado y eficiencia administrativa.
No obstante, surgen dudas dudas sobre el impacto que tendrá en la independencia de la política de atracción de inversiones.

‘No podemos seguir creando instituciones’
Moltó insistió una y otra vez en que la iniciativa busca “modernizar el Estado y fortalecer las inversiones”, reduciendo lo que calificó como duplicidades y estructuras innecesarias.
“No podemos estar creando instituciones. El propósito es modernizar el Estado y fortalecer las inversiones. Cuando se creó ProPanamá se duplicaron un montón de cargos: de finanzas, de administración, de recursos humanos… alrededor de 600 mil dólares en duplicidad de funciones”, afirmó.

El ministro añadió que la fragmentación institucional “dispersa los recursos y hace que las entidades no trabajen con los mismos objetivos”. Según su diagnóstico, la creación de ProPanamá en 2021, durante el gobierno de Laurentino Cortizo, como autoridad autónoma adscrita al MICI, provocó burocracia y mayor gasto, lo que “terminó por hacer perder recursos y tiempo”.
“Queremos un modelo de desarrollo único, que evite la duplicidad de estructuras y dé coherencia a las políticas de inversión y exportación”, sostuvo.
¿Qué establece la ley?
El proyecto crea la Oficina para la Promoción de la Atracción de Inversiones y Promoción de Exportaciones, que continuará utilizando el nombre ProPanamá, pero ahora bajo dependencia directa del despacho superior del MICI.
El texto también modifica el artículo 15 del Decreto Ley 6 de 2006, para reorganizar el viceministerio de Comercio Exterior, e incorpora dos direcciones: la Dirección Nacional de la Inversión y la Dirección Nacional de la Exportación.
Además, establece la creación de una mesa de alto nivel ad honórem integrada por los ministerios de Comercio, Relaciones Exteriores y Economía y Finanzas; Promtur; la Secretaría de Asuntos Económicos de la Presidencia y representantes del sector privado. Este órgano, según Moltó, servirá como espacio de asesoría para definir estrategias de atracción de inversiones, promoción de exportaciones y marca país.
¿Pérdida de autonomía?
Aunque la propuesta fue aprobada este miércoles en el pleno legislativo, varios diputados expresaron inquietudes sobre la pérdida de autonomía institucional y la falta de transparencia en la información presupuestaria. Durante el primer debate, los diputados Jhonathan Vega y Alexandra Brenes, de la bancada independiente Vamos, se manifestaron en esa línea y solicitaron datos sobre el gasto, la planilla y los resultados de ProPanamá.
La desaparición de la autoridad autónoma implica que todas las funciones, activos, cuentas bancarias, ferias y misiones comerciales pasarán al MICI, concentrando la gestión en una sola dependencia ministerial.
En segundo debate se introdujo un artículo propuesta por el diputado Miguel Ángel Campos que estipula que la nueva oficina deberá rendir cuentas. Ese artículo dice textualmente: “El Ministerio de comercio e industrias deberá incluir en su informe de gestión anual, los resultados obtenidos producto de las funciones realizadas por parte de la Oficina para la Promoción de la Atracción de Inversiones y Promoción de Exportaciones”.
‘Estado más ágil’
El discurso de Moltó apunta a un Estado más ágil y coordinado, pero el cambio marca también un giro institucional: de una agencia técnica con cierta autonomía a una oficina bajo línea jerárquica directa del Ejecutivo.
Sin embargo, el ministro Moltó añadió que el proyecto, que ahora pasa a tercer debate, consolida la narrativa del gobierno de José Raúl Mulino sobre la “racionalización del Estado”. ¿Se cumplirá este propósito? El tiempo lo dirá.


