“Hemos producido unos 20 kilos de uranio enriquecido al 20% y estamos trabajando para producir placas de combustible”. Estas palabras fueron dichas el 11 de julio por el jefe de la Organización Iraní de Energía Atómica, Ali Akbar Salehi, según la agencia de noticia Isna.
Este nuevo paso en el programa nuclear iraní vuelve a poner a la comunidad internacional en la necesidad de frenar las intenciones del Gobierno iraní. Hace un mes el presidente ruso, Dimitri Medvedev, afirmó que “Irán se acerca a la posesión del potencial que, en principio, puede ser utilizado para crear un arma nuclear”.
Lo cierto es que el uranio enriquecido puede ser utilizado como combustible para los reactores nucleares, en especial para el de investigación situado en Teherán. También se usan para la fabricación del núcleo fisible de una bomba atómica. Irán mantiene que su programa nuclear tiene fines pacíficos. La comunidad internacional sospecha que este país tiene intención de construir un arma nuclear.
Este anuncio ha preocupado al grupo negociador formado por Estados Unidos (EU), Francia, China, Rusia, Reino Unido y Alemania. Además, se produce un mes después de las últimas y durísimas sanciones impuestas a Irán por Naciones Unidas.
Esas medidas no dejaron indiferente al presidente iraní, Mahmud Ahmadineyad. Este político, que mantiene en jaque a la comunidad internacional por su empeño en continuar con el programa nuclear, afirmó que estas nuevas medidas son como un grupo de “moscas latosas”, según difundió la agencia EFE.
La Resolución 1929 llegó 22 días después que se ratificó la Declaración de Teherán, firmada el 17 de mayo. Este acuerdo era un pacto entre Irán, Brasil y Turquía. En este documento, el Gobierno iraní se comprometía a entregar al Gobierno turco 1.2 tonelada de uranio enriquecido al 3.5%.
Tras pasar un año, Irán recuperaría 120 kilos de combustible nuclear purificado a un 20%. Este material estaría destinado al reactor donde, según alegaciones del Gobierno de Teherán, se producen los isótopos necesarios para los tratamientos cancerígenos.
A los pocos minutos de conocerse que Irán se enfrentaba a nuevas sanciones, Ahmadineyad afirmó, según la agencia Isna, que “países que poseen la bomba atómica y que incluso la han utilizado nos amenazan bajo pretexto de que quizá en el futuro Irán construirá su propia bomba atómica. Yo les digo a esos países que las sanciones con las que pretenden castigarnos son como un pañuelo usado que debería ir a parar a la basura”.
