Ya había estado en algunas ocasiones en Panamá, para tratar temas de salud. Ahora hará vida en el país, porque es la nueva representante de la Organización Panamericana de la Salud (OPS).
Se trata de Ana Rivière-Cinnamond, quien se desempeñaba en el Departamento de Emergencias de la OPS, en Washington, Estados Unidos, antes de llegar a Panamá.
En su primera entrevista con un medio de comunicación nacional, la especialista se refirió a temas como la pandemia de la covid-19 y los retos que enfrenta Panamá y el mundo para los próximos años en materia de salud. También considera que, tras la pandemia, los sistemas de salud de la región deben fortalecerse.
¿Qué nos puede contar de su experiencia antes de arribar a Panamá?
He estado 20 años en el sistema de Naciones Unidas, como la Organización de Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), la Organización Mundial de la Salud (OMS), región de África, y antes de venir aquí estaba en el Departamento de Emergencias de la OPS en la sede en Washington, específicamente en la parte de análisis de datos epidemiológicos y modelamiento de enfermedades infecciosas.
¿Cómo se preparó la OPS frente a la pandemia de la covid-19?
Nosotros estábamos informados de todo lo que iba sucediendo y empezamos a actuar muy rápido sacando alertas epidemiológicas. Luego alertamos a los países de la región, sobre todo capacitarlos en las labores de identificación de casos desde los laboratorios, ya que esas capacidades no existían en ninguna parte del mundo. Se trabajó muy de cerca con los equipos de laboratorio de la OPS, así como [con los laboratorios de investigación] de los países, incluyendo Panamá, para que se prepararan ante el virus.
¿Qué lección nos deja la pandemia de la covid-19?
La covid nos deja muchas lecciones, pero también se debe tener en cuenta que era una realidad que se desconocía por completo, por lo que hemos tenido que ir aprendiendo al mismo tiempo todos. Entre las lecciones aprendidas está lo de siempre: que uno debe estar mejor prevenido que reaccionar. Lo que hemos visto es que muchos países buscaban tener las capacidades tanto de recursos humanos como equipamiento suficiente para reaccionar de forma rápida. Algunos países reaccionaron más rápido que otros, pero al final todos han sufrido.
¿Cómo manejó Panamá la pandemia?
Como le decía, todos los países han sufrido mucho y, por lo que tengo entendido, Panamá fue uno de los que logró adaptarse de forma relativamente correcta a las subidas y bajadas de los casos, ampliando y reduciendo la disponibilidad de camas. Creo que esto ha sido positivo, pero, como en todos los países, el tema fue complejo.
¿Cuáles deben ser los próximos desafíos de Panamá y los demás países de la región una vez superada la pandemia de la covid-19?
Yo creo que, justamente, uno lo que tiene que hacer es reflexionar sobre cómo fortalecer los sistemas de salud para que estemos preparados para eventos de este tipo y quizá otros que no tengan que ver con enfermedades infecciosas. Hay que tomar en cuenta que hay problemas subyacentes en muchas poblaciones y sociedades que causan muertes, como las enfermedades crónicas.
¿Qué opina sobre la unificación del sistema de salud?
Nosotros nos enfocamos en mejorar la calidad, el acceso y la disponibilidad de los sistemas de salud. El estructurar un sistema de salud depende mucho del diálogo que tengan todas las partes involucradas, llámese sector público, sector privado, oenegés, asociaciones de profesionales, organizaciones de pacientes, entre otras. En función de ese diálogo, cada uno de los países define el tipo de modelo que le conviene. No es un proceso fácil y toma tiempo, ya que sucede en muchos países. No hay un píldora que te resuelve de forma rápida el problema, [es] algo que debe ir evolucionando con el diálogo entre las partes implicadas.
¿Cuál considera que debe ser el camino a seguir para que los panameños tengan medicamentos más accesibles y a mejores precios?
Creo que están siguiendo la hoja de ruta correcta, que es el diálogo entre todas las partes implicadas. La lógica es la misma que cuando se discute el sistema de salud, solo que con actores distintos, y el objetivo principal es obviamente que haya un acceso equitativo para que las poblaciones pueden acceder a medicamentos a precios más razonables.
¿Cómo se pueden fortalecer los sistemas de salud?
A través del fortalecimiento del nivel primario, donde la gente pueda acercarse sin tener que ir directamente a un hospital. En ese nivel lo ideal es que puedan tener acceso a insumos, especialistas, entre otras facilidades.
¿Qué puede esperar el país de su misión en Panamá?
La misión de la OPS es siempre apoyar a los países. Estamos con un equipo muy fuerte de expertos. Estamos para dar la mano al Ministerio de Salud y a la población, en lo que se pueda.

