En la provincia de Darién hay una reserva natural que atesora unas 60 nuevas especies para la ciencia y la gran mayoría son endémicas de allí, es decir, no se encuentran en otra parte del mundo: el cerro Chucantí.
Esta joya ecológica es la cima más alta de la serranía de Majé y está ubicada en una zona de transición biológica clave entre las provincias de Darién y Panamá. Su raro bosque nuboso es frío y húmedo, y contiene una amplia variedad de fauna y flora.
La reserva es administrada por la Asociación Adopta Bosque Panamá, una organización no gubernamental, sin fines de lucro, cuya misión es promover la conservación y desarrollo sostenible de los ecosistemas.
En palabras del biólogo y director ejecutivo de la Asociación Adopta Bosque Panamá, Guido Berguido, el sitio tiene mil 439 metros de altura y la extensión de la reserva protegida es de 800 hectáreas, unas 16 veces el parque Omar, en el corregimiento de San Francisco.
No obstante, Berguido considera que debido a la biodiversidad de la zona, el Estado panameño debería proteger también las demás hectáreas que rodean el cerro Chucantí.
Aunque se trata de una iniciativa privada, el ambientalista subraya que con el paso de los años se les han unido otros profesionales, sobre todo biólogos, interesados por la conservación.
“El objetivo principal es la conservación, hemos delimitado la reserva, se mantienen personal permanente aquí en el terreno, guardabosques que nos ayudan a conservar los bosques”, dijo.
Investigación científica
Como parte de la dinámica de este sitio protegido, la investigación científica es parte importante de las actividades que se desarrollan allí.
En la zona convergen especialistas en ranas y reptiles, quienes desarrollan diferentes tipos de proyectos, como el caso de las cámaras trampa, que están monitoreando la actividad de mamíferos y otras especies que utilizan estos bosques.
“Panamá tiene la bendición de ser un país con una gran biodiversidad, puesto que tenemos parques nacionales a lo largo y ancho de la república. Tenemos un porcentaje importante del país, cerca del 40% se dice que son áreas protegidas de una forma u otra, sin embargo, en muchos casos, no se desarrolla, o no se investigan como debe ser”, puntualizó.
El cerro Chucantí también ha sido declarado un área natural importante para las aves por la Sociedad Audubon de Panamá y área de alta prioridad para las aves endémicas del mundo por Birdlife International, una organización internacional dedicada a la protección de las aves y sus hábitats.
El también biólogo e investigador, Ángel Romero, manifiesta que cerro Chucantí es un lugar donde su nivel de endemismo es “demasiado alto”, lo cual debe ser visto como valioso para la conservación de la flora y fauna dentro de Panamá.
Así define su experiencia en esta reserva: “Tú no sabes qué te puedes encontrar, si una serpiente o si una rana. Su belleza es muy particular, es un lugar especial”.
(Con información de Alexander Arosemena)


















