El Comité de Patrimonio Mundial, formado por 21 países, desestimó, por el momento, la inclusión de la Ruta Colonial Transístmica de Panamá en la reconocida Lista del Patrimonio Mundial.
Panamá desea ampliar el territorio ya enmarcado en el Patrimonio Mundial de la Humanidad –que actualmente abarca el casco antiguo de Panamá Viejo y las fortificaciones de Portobelo-San Lorenzo- agregando las rutas del Camino de Cruces y la del Camino del Real.
Se trata de dos rutas históricas que conectaron el Mar Caribe con el Océano Pacífico durante la época colonial, antes de la construcción del ferrocarril transístmico y del Canal.
El órgano responsable de la Unesco decidió, por consenso, que la propuesta panameña no reunía las características suficientes para ser inscrita en la Lista de Patrimonio Mundial. Al menos de momento.


