Delegados del Consejo Nacional de Trabajadores Organizados (Conato) ratificaron este sábado, 26 de junio, su salida del diálogo de la Caja de Seguro Social (CSS), pese a los acercamientos que hizo las últimas semanas el gobierno de Laurentino Cortizo para que regresaran.
“Con esto, lo que procede es anunciar oficialmente nuestro retiro de la mesa del diálogo”, dijo Guillermo Puga, dirigente de Conato.
La propuesta de regresar o no al diálogo fue sometida a votación ante el Consejo de Delegados de Conato, que se realizó esta tarde en el Hotel El Panamá. 128 votaron para ratificar la salida de las conversaciones y 28 votaron a favor de volver a la mesa.
Conato también acordó exigir al gobierno que convoque una mesa tripartita -trabajadores, empresarios y gobierno- con la intermediación de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), para discutir las reformas a la Caja.
“Una mesa de diálogo por la CSS requiere que esté formada por los representantes legítimos del sector productivo”, agregó Puga, tras criticar la participación de partidos políticos y diputados, entre otros, en la actual mesa.
En comunicado, la organización de trabajadores sostuvo que “el actual diálogo aún no contiene las garantías mínimas para una discusión democrática, participativa y equitativa, garantías planteadas en los cincos puntos señalados por el Conato desde un principio, entre ellos la elección de un moderador elegido por la mesa, la recomposición de los representantes en el diálogo y la aceptación de la vuelta al sistema solidario”.
Advirtió que el plan de acción que avalaron contempla la organización de una huelga general y así como manifestaciones.


El pasado martes, el gremio había indicado al presidente Cortizo su interés de formar parte del debate, tras levantarse de la mesa de conversaciones en marzo pasado. Pero antes debían realizar la asamblea de delegados.
Durante la reunión con Cortizo plantearon sus “condiciones necesarias” para que el proceso de diálogo tenga éxito, como el restablecimiento del sistema solidario de pensiones; la suspensión temporal del diálogo para el desarrollo del estudio de la situación financiera de la CSS por personal técnico de la Organización Internacional del Trabajo (OIT); el cambio del facilitador Joaquín Villar, para en su lugar designar a “una persona que cuente con la probidad y confianza de las partes”, y, por último, que se mantenga la integralidad y el carácter público de la CSS.


