Este año da muestras de que el flujo migratorio por Darién, la selvática frontera entre Colombia y Panamá, será mucho mayor que años atrás. Los números dan cuenta de ello.
El más reciente informe estadístico del Servicio Nacional de Migración precisa que el tránsito de migrantes irregulares por Darién, durante los primeros seis meses de 2022, se incrementó en 85% comparado con el mismo período de 2021.
Entre enero y junio de este año cruzaron la frontera selvática 48 mil 430 migrantes, mientras que entre enero y junio de 2021 lo hicieron 26 mil 216. Además, el informe del Servicio de Migración indica que el 60% de los migrantes tiene nacionalidad venezolana y el 15% es menor de edad.
A este ritmo, especialistas en el tema consideran que este año se superará la cifra de 133 mil migrantes que se adentraron a Darién el año pasado, cifra considerada como un récord.
Esto se da en momentos que Estados Unidos brinda facilidades a migrantes venezolanos, como la ampliación de su Estatus de Protección Temporal (TPS, por sus siglas en inglés), que los protege de la deportación y permite trabajar en el país.
Una ampliación que, sin embargo, solo aplica para quienes ingresaron en Estados Unidos hasta marzo de 2021, por lo que defensores de los inmigrantes, legisladores demócratas y líderes latinos basados en Florida instan al gobierno de Joe Biden a ampliar el alcance del TPS para beneficio de quienes están llegando después.
En palabras del defensor del Pueblo, Eduardo Leblanc, el tema migratorio ha cambiado este año porque vienen más de Venezuela que de Haití. Esta última nacionalidad fue la que dominó durante 2021.
“Monitoreamos las posibles rutas y hemos tenido comunicación con varias entidades para hacer las rutas más seguras”, dijo Leblanc respecto a una reunión que tuvo la semana pasada con autoridades del Ministerio de Salud, Servicio Nacional de Fronteras, Organización Internacional para las Migraciones, entre otras entidades, en Carreto, comarca de Guna Yala.
Esta es una de las nuevas rutas usadas por los migrantes para cruzar de Colombia hacia Panamá, ya que es más corta que otras, como la que atraviesa Jaqué. No obstante, uno de los principales problemas es que en Carreto no hay centro de salud. El más cercano está a unos 30 minutos vía marítima en Puerto Obaldía, Guna Yala.
“Fuimos a Carreto y hablamos con autoridades tradicionales del lugar. Esa nueva ruta nos ha sorprendido a todos”, sostuvo el defensor, y agregó que les genera inquietud el área por temas como el narcotráfico y tráfico de personas, y eso puede generar un caos.
De momento, las autoridades de derechos humanos de Panamá, así como las de Migración y algunos estamentos de seguridad, tienen en agenda un encuentro con sus homólogas de Colombia, aunque no se ha definido la fecha.
Protesta afecta traslado
Las protestas de los últimos días a lo largo del país han complicado el traslado de los migrantes desde los albergues en Darién hasta los de Chiriquí. De hecho, Migración confirmó que el movimiento de migrantes hacia Chiriquí se vio afectado por los cierres en la carretera Interamericana, registrándose incluso momentos tensos con los manifestantes.
Por ello, hizo un llamado para que se permita el tránsito de los migrantes dentro del país y continúen su camino hacia Centroamérica.


