El fenómeno natural del afloramiento, que ocurre cada año en el golfo de Panamá durante la estación seca, no se presentó en 2025, un hecho sin precedentes en al menos cuatro décadas.
La ausencia de este proceso fue documentada en un estudio del Instituto Smithsonian de Investigaciones Tropicales (STRI), que atribuye la situación al debilitamiento de los vientos alisios.
El afloramiento —o surgencia— es un proceso oceanográfico que permite el ascenso de aguas frías y ricas en nutrientes desde las profundidades hacia la superficie. Gracias a este fenómeno, el Pacífico panameño mantiene temperaturas más bajas en la temporada de verano, las pesquerías locales se sostienen con altos niveles de productividad y los arrecifes coralinos encuentran cierto alivio frente al estrés térmico.
Según el STRI, los registros muestran que entre enero y abril la surgencia ha sido un patrón constante y predecible en el golfo de Panamá durante al menos 40 años. Sin embargo, en 2025 los investigadores observaron que este proceso no se produjo, lo que redujo los descensos de temperatura y la productividad marina típica de la temporada.

El hallazgo, publicado en la revista PNAS, señala que una alteración en los patrones de viento explica la falta de surgencia, aunque los científicos advierten que se requieren más investigaciones para determinar las causas exactas y las posibles repercusiones sobre la pesca y las comunidades costeras que dependen de estos recursos.

Para los expertos, este hecho constituye una señal de alerta sobre la vulnerabilidad de los sistemas de surgencia tropical.
A pesar de su importancia ecológica y socioeconómica, estos procesos continúan siendo poco monitoreados, lo que refuerza la necesidad de invertir en capacidades de observación y predicción océano-climática en regiones tropicales del mundo.

Este es uno de los primeros resultados importantes de la colaboración entre el barco S/Y Eugen Seibold del Instituto Max Planck y el STRI.

