El rechazo ha sido masivo. Residentes, oenegés y empresarios expresaron su malestar en el proceso de evaluación de tres estudios de impacto ambiental (EIA), todos de categoría II, para extraer 14 millones de metros cúbicos de arena submarina frente al Parque Nacional Portobelo, en la provincia de Colón.
Al menos unos 15 escritos de oposición han presentado lugareños, organizaciones de la sociedad civil y el sector empresarial, quienes solicitan al Ministerio de Ambiente que rechace los EIA, porque la extracción de semejante cantidad de arena submarina provocaría un daño ecológico irreversible a esta región turística del país.
A esos escritos hay que sumar los comunicados emitidos por varios sectores y gremios del país, los cuales exhortan a respetar los espacios marinos y costeros del país.
Ayer viernes, la Asociación Panameña de Ejecutivos de Empresa (Apede) comunicó que observa, con “suma preocupación”, las operaciones de extracción de arena submarina en la Costa Arriba de Colón.
De acuerdo con Apede, la provincia de Colón, en especial su Costa Arriba, mantiene actualmente una oferta turística “importante”, aunque todavía no se ha explotado todo su potencial. Todo esto está en riesgo con una extracción como la que se propone hacer ahora en Portobelo.

“Las operaciones de extracción no metálica cercana a zonas costeras, parques nacionales, comunidades y negocios turísticos generan impactos adversos, tanto a las personas, las especies marinas y playas, así como a la economía local”, manifestó Apede.
Además, el gremio recordó que en el pasado se han autorizado concesiones para este tipo de extracciones por parte de las autoridades competentes, en áreas como Punta Chame, Panamá Oeste y el sector del archipiélago de Las Perlas, con las desastrosas consecuencias que pueden verse hoy en día: zonas erosionadas y disminución de franjas de playa.
Esa inquietud la comparte también la Cámara de Comercio de Colón. Advierte que los EIA debían ser categoría III (y no II), por el impacto que se generaría en el lugar. Un EIA categoría III también obliga a celebrar una consulta pública con la comunidad.
Los puntos específicos de extracción de la arena submarina que solicita Grupo Los Farallones, S.A. se encuentran en el distrito de Portobelo, entre los corregimientos de Cacique y Puerto Lindo.
El primer estudio es para la extracción de arena submarina en un polígono de 450 hectáreas, mientras que el segundo abarca una extensión de 484 hectáreas y el tercero otras 484 hectáreas. En total, suman mil 418 hectáreas.
Ecologistas
Unas 16 organizaciones ambientales emitieron una nota conjunta pidiendo que se rechace la extracción de arena frente al área protegida. Algunas de las que suscribieron la nota fueron la Asociación Nacional para la Conservación de la Naturaleza (Ancón), el Centro de Incidencia Ambiental (Ciam), Panamá Sostenible, Audubon Panamá y Promar, entre otras.
Para estas oenegés, a pesar de que en los EIA se reconoce que habrá una alteración del fondo marino, no se consideran los impactos directos, indirectos y sinérgicos sobre las playas y arrecifes de coral cercanos, todos ellos dentro del Parque Nacional Portobelo.
Al igual que la Cámara de Comercio de Colón, opinan que las tres áreas solicitadas en concesión para extracción de arena submarina están ubicadas en el mismo sitio. Son tres áreas colindan entre sí, por lo cual se debe considerar un solo gran proyecto. No se entiende, entonces, por qué hay tres EIA categoría II, en lugar de un solo estudio categoría III.
Insisten que el EIA debe ser categoría III y no II, para que se exijan requerimientos técnicos y una consulta ciudadana mucho más robusta, por los impactos directos e indirectos.
Isla Farallones, a la izquierda de isla Mamey en bahía Cacique y Puerto Lindo. Zona de desarrollo de turismo ecológico, de playa, buceo y kayak. Firma petición de rechazo a concesión de extracción de arena qué afecta esta zona en Parque Nal. Portobelo https://t.co/7kVXimwvKm pic.twitter.com/a0qhCQTWSI
— Irvin A. Halman (@iahalman) June 11, 2023
“Las organizaciones abajo firmantes rechazamos estos proyectos por atentar contra recursos naturales, de biodiversidad, turísticos, históricos y culturales del Parque Nacional Portobelo y sus zonas aledañas, que son recursos estratégicos y claves para el desarrollo sostenible de las comunidades locales y del país”, concluye el comunicado.
La jugada
Ayer viernes, abogados y biólogos del Ciam acudieron al Ministerio de Ambiente a presentar su escrito de oposición contra los EIA que presentó Grupo Los Farallones.
Uno de los principales argumentos del Ciam es precisamente la segmentación del proyecto en tres. No entiende por qué el promotor hace esto, si todo sucederá en el mismo espacio geográfico.
Para la oenegé, esta fragmentación de los estudios ambientales tiene “consecuencias negativas”, pues imposibilita predecir y responder a los impactos de forma integral (particularmente los acumulativos y sinérgicos) y ello, en esencia, hace que la evaluación de impacto ambiental sea ineficaz.
De hecho, consideran que esta fragmentación parece haber sido diseñada “deliberadamente” para evadir la aplicación de las disposiciones de la Ley 32 de 1996, la cual en su artículo 12 limita la extensión que pueden tener las concesiones de explotación de minerales no metálicos, como la arena, utilizados como materiales de construcción.
El citado artículo indica que las áreas objeto de los contratos de concesión tendrán una extensión superficial no mayor de 2 mil hectáreas para la exploración, ni mayor de 500 hectáreas para la explotación. Se exceptúan las de piedra caliza y de cantera, las cuales podrán tener una superficie de extracción de hasta mil hectáreas.

Lo anterior significa que si la promotora no hubiese segmentado las concesiones en menos de 500 hectáreas cada una, no tendría posibilidades de que le aprobaran el proyecto. Como ya se dijo, las tres concesiones suman mil 418 hectáreas.
Otros detalles
Los tres estudios fueron presentados en abril por Grupo Los Farallones, S.A., cuya presidenta y representante legal es Tydemaith Moreno.
Actualmente, el promotor de esta actividad publicó en varios diarios de la localidad un aviso de consulta pública, con el objetivo de que los interesados puedan hacer sus comentarios relacionados con uno de los estudios de impacto ambiental.
Según la convocatoria, la extracción de arena se llevará a cabo por medio de draga de succión, las cuales cargarán el material dentro de un barco.
Entre los impactos positivos del proyecto -según la empresa- está la generación de empleo, el presunto aporte a la economía y la disponibilidad de materia prima para el sector de la construcción. Mientras que los impactos negativos son: alteración de fondo marino, contaminación de las aguas por fuga de hidrocarburos y desplazamiento de las especies a otros sitios, entre otros.
Para el desarrollo del proyecto, el promotor indicó que tramitará una concesión con el Ministerio de Comercio e Industrias (Mici) de esta área de extracción, por un periodo de 20 años.
De momento, el Ministerio de Ambiente se encuentra evaluando los tres estudios ambientales, los cuales de aprobarse permitirían la extracción total de 14 millones de metros cúbicos de arena. En dos de los polígonos se extraerán 8 millones de metros cúbicos (4 millones en cada uno) y en otro, 6 millones de metros cúbicos.
En esta zona de Portobelo se han identificado unas 27 especies de corales, que hacen esta región única en el país.


