La empresa Transporte Masivo de Panamá, S.A. (MiBus) presentó su vista presupuestaria para 2026 este jueves 18 de septiembre ante la Comisión de Presupuesto de la Asamblea Nacional.
Sin embargo, el proyecto sufrió un recorte significativo de más de 66 millones de dólares solo en el renglón de funcionamiento, por parte del Ministerio de Economía y Finanzas (MEF).
El presupuesto recomendado por el MEF para MiBus para el próximo año fiscal fue de $123.4 millones.
En el caso de funcionamiento se solicitaban $177.6 millones; no obstante, la recomendación fue de $110.9 millones.
En el renglón de inversión, lo solicitado ascendía a $34.6 millones, pero lo recomendado fue de $12.6 millones.

Este año, el presupuesto aprobado fue de 4125 millones y actualmente la empresa está solicitando traslados de partidas para cubrir el pago de combustibles y la compra de repuestos.
Precisamente, antes de sustentar la partida presupuestaria 2026, la Comisión de Presupuesto aprobó dos traslados de partidas para estas áreas por un monto total de $30 millones 665 mil.

MiBus advirtió ante la Comisión de Presupuesto que el financiamiento asignado para 2026 es insuficiente para garantizar la operación del sistema de transporte público y cumplir con los compromisos de inversión proyectados.
Carlos Sánchez, gerente de MiBus, explicó que entre los rubros que requerirán fondos están el combustible para los 1,100 metrobuses en operación.
Indicó que, con el presupuesto recomendado, solo habrá combustible hasta mayo de 2026; el resto del año, “nos tocará pedirlo fiado”, dijo Sánchez.
Presupuesto | El gerente general de @oficialMiBus, Carlos Sánchez Fábrega, sustentó el presupuesto recomendado para la entidad, que asciende a B/.123.4 millones: B/.110.9 millones para funcionamiento y B/.12.6 millones para inversión. pic.twitter.com/IykCbUzaYW
— Asamblea Nacional (@asambleapa) September 18, 2025
La reducción en el presupuesto de funcionamiento, de acuerdo con lo solicitado, generará una brecha que podría dejar sin cobertura varios segmentos desde el segundo trimestre, incluyendo lavado, peajes, chapistería, transmisión de datos, compra de diésel y repuestos.
Sánchez informó a los comisionados que, solo para cubrir esta brecha, se necesitarán aproximadamente $60 millones, distribuidos de la siguiente manera: $21 millones para repuestos, $19 millones para combustible de la flota, $9 millones para servicios operativos, $5.8 millones para reparación y mantenimiento de la flota, $2.6 millones para seguridad en las zonas pagas y $2.5 millones para transmisión de datos.
En cuanto al presupuesto de inversión, la empresa advirtió que necesitará $24.3 millones adicionales para ejecutar el contrato de préstamo con el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), destinado a la compra de 53 buses eléctricos de baterías y a la conexión de la infraestructura necesaria para la carga de los autobuses.

“El gobierno firmó un contrato de préstamo con el BID para la compra de 60 buses eléctricos, que convertirán a la ciudad de Panamá en la primera de Centroamérica y el Caribe con una flota importante de este tipo”, destacó Sánchez.
No obstante, estos recursos no se reflejan en el presupuesto 2026, lo que impide cumplir con la instalación de cargadores eléctricos y la adecuación del patio de El Chorrillo.
Una parte crucial de esta adecuación es la interconexión eléctrica subterránea desde la estación de Marañón, con un costo estimado de $2 millones, necesaria para evitar sobrecargar los circuitos actuales y garantizar el suministro de energía sin afectar a los residentes del área.
“Si no contamos con el presupuesto para estos proyectos, no podremos cumplir con los compromisos ni garantizar la continuidad del servicio”, acotó el vocero de MiBus.
Respecto al subsidio del pasaje —actualmente en 0.25 centésimos por usuario—, Sánchez explicó que el anteproyecto solicitaba $86 millones, pero solo se asignaron $64 millones, dejando un déficit de $22 millones, lo que podría implicar un incumplimiento de lo pactado en el contrato.

Actualmente, de los 4,000 colaboradores de MiBus, 3,000 son operadores y alrededor de 600 trabajan en mantenimiento preventivo y correctivo, lo que evidencia la alta dependencia de recursos para mantener la flota operativa.
“Sin respaldo presupuestario no podemos emitir contratos ni órdenes de compra, lo que pondría en riesgo la operación normal del servicio”, advirtió el directivo. También subrayó que los recortes obligarán a reprogramar partidas, afectando la planificación y la calidad del servicio, ya que la flota —que tiene entre 10 y 12 años de uso— requiere mantenimiento constante para garantizar la seguridad de los pasajeros.
En cuanto a la expectativa de movilización de pasajeros, se estiman 3.6 millones de viajes en 2026, lo que representa un incremento de casi 10% con respecto a 2025.
Para cumplir con este objetivo, es indispensable contar con buses en óptimas condiciones, operadores capacitados y un presupuesto suficiente.


