El huevo y el atún son las dos proteínas más frecuentes que reciben los pacientes hospitalizados en el Complejo Hospitalario Dr. Arnulfo Arias Madrid de la Caja de Seguro Social (CSS), debido a la falta de pollo, carne, pescado u otros productos cárnicos.
Una sola inspección del equipo de la Dirección de Protección de Derechos Humanos de la Defensoría del Pueblo en el Complejo el pasado 21 de junio confirmó la escasez de dichos productos en los cuartos fríos de las zonas de almacenamiento de alimentos y en el menú que se entrega a los pacientes hospitalizados.
Frente a esta situación, el director nacional de Servicios de Salud de la Caja de Seguro Social (CSS), Gustavo Santamaría, aseguró ayer miércoles que ya cuentan con carne de res y de pollo. Llegaron 500 kilogramos de carne rincón, dijo.
Este centro hospitalario maneja por año un presupuesto para alimentos de $2 millones.
La Defensoría del Pueblo señaló a este medio que las inspecciones continuarán en los hospitales tanto de la CSS como del Ministerio de Salud (Minsa) en todo el país, con la finalidad de elaborar y presentar un informe pormenorizado y con recomendaciones al respecto. Además, procedió a abrir una queja por la supuesta violación de los derechos humanos de los pacientes.
Los otros hospitales que han visitado son: Gustavo Nelson Collado y Cecilio Castillero, en la provincia de Herrera; y el Anita Moreno, en Los Santos.
La inspección surgió a partir de denuncias relacionadas con la alimentación que reciben los pacientes de la CSS y que han sido publicadas en redes sociales.
La justificación
La CSS atribuyó la falta de productos cárnicos y otros al “incumplimiento” de algunos proveedores, lo cual, afirmó, ha provocado una demora en la entrega de los productos.
Además, informó que para el Complejo se han estado realizando licitaciones para el suministro de alimentos, pero han sido declaradas desiertas porque las empresas no participan. “Dependemos de que haya proveedores que quieran participar en los actos públicos”, indicó la entidad.
Santamaría, explicó que es importante que la población comprenda lo que es una dieta regulada por nutrición y a requerimiento de los médicos tratantes, quienes establecen la alimentación de acuerdo con la patología del paciente.
Añadió que esta es la razón por la que se observan distintos menús, unos con solo vegetales, otros con puré, proteínas o frutas; incluso, dietas para pacientes que no pueden recibir alimentos a través de la boca.
El funcionario aseguró que la dieta corriente lleva proteína, carbohidratos, vegetales e incluso puede incluir postre. No obstante, la dieta restrictiva de pacientes está acorde con lo indicado por los médicos.
El menú de los pacientes está a cargo del Servicio de Nutrición y Dietética del Complejo, integrado por 142 funcionarios, divididos en turnos, que preparan alrededor de 4 mil 500 platos de comidas diariamente, incluyendo 500 con base en dietas especiales solicitadas por el médico tratante, que deben se preparadas bajas en azúcar y sal.
El director nacional de los Servicios de Salud de la CSS aseguró ayer que tienen atún, huevo y productos cárnicos, como pollo y res. Llegaron 500 kilogramos de carne de rincón, remarcó.
Además, subrayó que la variación de precios de los alimentos en el mercado ha sido uno de los agravantes para que algunos proveedores no quieran participar en las licitaciones, toda vez que los precios de hoy no son los mismos de mañana o la próxima semana.
Por ello, dijo, la CSS tiene una comisión que evalúa permanentemente los precios en el mercado, a fin de comprar con las tarifas del momento y que la transacción sea atractiva para los proveedores y, por tanto, participen en los actos.
A juicio de Enma Pinzón, de la Federación Nacional de Asociaciones de Pacientes con Enfermedades Crónicas y Degenerativas, lo que sucede con los alimentos en la CSS es muy parecido a lo que ocurre con las medicinas: problema de liquidez.
Pinzón consideró que las autoridades deben dar a conocer de forma oficial los problemas que están presentando.
La nutricionista dietista Jennifer Katz indicó que la dieta recomendada para los pacientes hospitalizados varía según la indicación del médico. Cada paciente tiene un requerimiento diferente, es importante tener en cuenta que algunos de los pacientes hospitalizados dependen únicamente de la alimentación proporcionada por el hospital para la cobertura de sus necesidades, dijo.
Subrayó que los productos cárnicos son una buena fuente de proteína, vitaminas y minerales, sin embargo, una dieta sana y equilibrada puede incluir proteínas de productos cárnicos, así como también del pescado y los huevos o proteínas de origen vegetal como frijoles, lentejas, garbanzos, entre otros.
Añadió que estudios internacionales demuestran que la desnutrición en los pacientes se asocia con un mayor riesgo de infecciones hospitalarias, retraso en la cicatrización de heridas y estancia hospitalaria más prolongada, mayor costo del tratamiento y mayor riesgo de morbilidad y mortalidad.
