2025. El diario El Panamá América cumplirá cien años. Es una historia patria de una empresa hoy zarandeada.
1980. En agosto y en medio del régimen militar, debuta un diario opositor, que no se deja intimidar ante las charreteras: La Prensa. Fue objetivo del régimen: sufrió censura, destrozos, persecución y cierre. Hoy completa 44 años.
1949.Este mes La Estrella de Panamá completa 175 años.
Nelson Rounsevell, australiano radicado en California, encendió esa chispa, con muchas dificultades y entusiasmo. Una década antes publicó ediciones de revista ilustrada, con igual nombre, . Creó semanarios arrevistados en Lima, La Paz y Santiago. De Santiago lo echaron, acusándolo de ser agente de la CIA (espionaje de EUA) y, a su retorno, creó The Panama American.
Su mayor impacto fue en manos del expresidente Harmodio Arias. Cuando Arias conquistó la Presidencia en 1932, Rounsevell, allegado al mandatario, le ofreció el diario. Arias prefirió salir de la Las Garzas para adquirirlo. En 1938, entonces estaba a todo vapor la campaña presidencial de su hermano Arnulfo, que triunfó en 1940. Las décadas siguientes fueron de mucho esplendor, al punto que la editora fue apodada “El imperio de la Calle H”, por su ubicación en el barrio de Santana, próximo a la Avenida Central.
Rounsevell funda The Panama American Publishing Company, Inc., y publica el diario The Panama American en inglés, encaminado a servir a la colonia norteamericana en la Zona del Canal. Desde 1927, Rounsevell invitó a Arias para que editara una sección en español, no obstante estaba muy ocupado en su tarea profesional abogadil. Por insistencia, el australiano consiguió que dos años después Arias se pusiera al frente de esa sección en castellano. Esa sección fue crucial en el movimiento golpista de Acción Comunal, de enero de 1931, y en la que tuvieron participación destacada Harmodio y su hermano Arnulfo. Ambos ocuparon por las urnas el Palacio de Las Garzas.
“Divulgar la verdad que los demás ocultan”, lema del diario, que ha concitado voces diversas para narrar la agitada historia de Panamá y estimular una dinámica opinión pública.
El legado de Arias como presidente fue la fundación de la Universidad de Panamá (1935) y como figura pública expresidencial la creación de ese imperio editorial, que él dirigió con pasión y apertura. De ese proyecto, nacieron periódicos de mucho impacto como La Hora y Crítica. En el decenio del 60, el sistema offset reemplazó a los tipos móviles de imprenta, y finales de esa década la familia Arias fue desplazada por el régimen militar de la editora, ya en operación en Vista Hermosa.
Con el retorno de la democracia, los legatarios de Arias retornaron a la editora EPASA y en 2010 la vendieron por más de 40 millones a un grupo en el que figuraba encabezados por Alberto Eskenazi y Henry Mizrachi, informó una fuente de esa editorial. Ricardo Chanis, quien fue presidente de la editorial, reveló que el dueño era el presidente Ricardo Martinelli. Pero no solo eso, el testigo protegido detalló que Martinelli se jactaba de que la compra sería un home run, un grand slam, porque si bien controlar medios de comunicación desde el poder era importante, aún más importante era cuando se salía del gobierno.
Por la compra fraudulenta del legado de Harmodio Arias, el expresidente Martinelli ha sido condenado a casi 11 años de prisión y a la automática inhabilitación para aspirar a la Presidencia en las elecciones años. En el publicitado caso New Business, por el nombre de la cuenta en que reunió el dinero para la adquisición de EPASA. ¿Cuál será el futuro de ese periódico centenario?
El autor es docente, periodista y filólogo

