En la era digital y de la inteligencia artificial se comienzan a dibujar nuevos horizontes en la educación y en la formación de los líderes del futuro para adaptarla a las exigencias del mercado laboral.
Cada vez más empresas buscan personas capacitadas en áreas técnicas, pero que también puedan tener habilidades para trabajar en equipo, que posean un pensamiento crítico, que puedan comunicarse asertivamente, estructurar soluciones, planificar y que tengan la capacidad para enfrentar retos. Eso incluye un compromiso con el medioambiente y la sostenibilidad.
Se trata de una fusión de habilidades intelectuales y educativas, pero también de soft skill o habilidades y capacidades blandas que implican que desde la academia se forme a los jóvenes de forma personalizada e integral y se rompan paradigmas y esquemas tradicionales en el área educativa.
En el conversatorio Preparando a los líderes del mañana, alineando las expectativas de las empresas con la educación, realizado en el King’s College School Panamá y organizado por La Prensa, Martes Financiero y con el apoyo del INCAE, expertos en educación y altos ejecutivos de empresas multinacionales y organismos internacionales analizaron los desafíos que tiene el sector educativo para formar a los estudiantes para el mercado laboral y adaptarse a las tendencias del mundo moderno.

Oliver Proctor, director de King’s College School Panamá, resaltó que dado los cambios a los que se enfrentarán los jóvenes al salir de su preparación académica y con la visión de una formación universitaria posterior, se enfocan en brindar una formación y educación personalizada, en la que los alumnos están en el centro y son líderes en su camino hacia la universidad y hacia el mercado laboral.

“Tenemos un currículo internacional que les permite conocer las tendencias globales y están descubriendo sus habilidades blandas y las más fuertes para enfrentarse de forma efectiva al mercado laboral”, indicó Proctor.
¿Qué buscan las empresas al contratar a los empleados y para formar líderes?
Juliana Otálvaro, gerente senior ejecutiva de Michael Page para Centroamérica y Caribe, resaltó que las empresas y compañías multinacionales en todo América Latina están buscando líderes que tengan entre sus competencias que puedan trabajar en equipo, que sean ágiles y que se puedan ser empáticos con los problemas que enfrenta la sociedad.
“Se habla mucho de la diversidad y de la inclusión y cómo puede la diversidad tener este espacio a partir de la empatía. Es importante que se pregunten cuando están enfrentando el desafío del mundo laboral, cómo podemos tener mucha información académica, poca experiencia, altas ganas de hacer las cosas y cómo las compañías pueden aprovechar esa actitud y formar a los líderes en términos de competencia”, dijo Otálvaro al señalar que la flexibilidad, la capacidad de adaptación y el trabajo en equipo son vitales.

Otálvaro precisó que al analizar aquellas labores repetitivas y automatizadas que la tecnología y las herramientas de inteligencia artificial están abordando, y donde se están sustituyendo trabajos manuales y cargos que realizan las personas con el objetivo de buscar mayor productividad y agilidad, también queda un espacio para resaltar el rol de la humanidad en el mundo laboral.
Explicó que surge cada vez más la necesidad de que las personas asuman el rol humano dentro de las organizaciones con capacidades como la honestidad, el trabajo en equipo, la empatía, la inspiración y la creatividad que la tecnología no pueden sustituir. “Ser emprendedor, sacar adelante una familia, luchar por los ideales y lograr metas. Debemos salirnos de la zona de confort para explorar en esas habilidades que nos permitirán abordar los desafíos en el mercado laboral. Los jóvenes deben construir su marca propia, con su propio sello, para dejar una huella que nos hace únicos”, agregó.
Guillermo Márquez, asesor regional senior en comunidades de Onusida para América Latina y el Caribe, expuso a título personal su experiencia en el mundo institucional y cómo la educación y el trabajo en el campo del desarrollo social y hacia las comunidades fue trascendental en su vida profesional.
“El primer mensaje es que estamos en un mundo de mucha competencia en donde cada vez hay más exigencias académicas y de experticia en el campo que escogemos para desarrollar. Trabajo en el campo de la salud, soy médico de formación y, al ver las deficiencias en el sistema de salud, decidí abordar el tema de forma más amplia para apoyar a los gobiernos y a la comunidad a superar esos problemas. Y el mensaje clave es tener excelencia y si escogemos la salud como nuestro campo laboral, estar siempre muy actualizados en conocimiento, innovaciones y los últimos avances.

Precisó además que cuando se trabaja en organismos como las Naciones Unidas e instituciones de desarrollo social hay que tener el compromiso de demostrar y alcanzar los resultados, trabajar con las comunidades, entender las necesidades locales y comunicarse de forma efectiva con diferentes personas y poder comunicar la información científica, tanto a los ciudadanos, como a los gobiernos y a las instituciones.
Por su parte, Ignacio Guilenea, director de la subregión de América Latina de la empresa Hilti, afirmó que los jóvenes enfrentan una época mucho más acelerada y mayores exigencias, pero con la ventaja de tener a su disposición herramientas tecnológicas que pueden ayudar a aprovechar aún más las habilidades y potenciar el conocimiento.
Ante una audiencia mayoritaria de estudiantes, Guilenea aseguró que la tecnología, como la Inteligencia Artificial, y la sostenibilidad son dos temas que las empresas están resaltando en sus procesos e incorporando en sus operaciones.

Indicó que cuando decidió estudiar ingeniería industrial lo único que sabía era que le gustaban los números y se enfocó en llevar a cabo esa carrera con excelencia. “Sea lo que sea que elijan, háganlo con excelencia y con el 100% con toda la pasión que tengamos que cosas buenas comienzan a suceder. Muchas veces no son solo las habilidades técnicas, sino demostrar que se tienen muchas ganas de aprender, de trabajar y de salir adelante y demostrar que se tiene disposición”, aconsejó.
Resaltó que las nuevas generaciones ahora tienen a su disposición la posibilidad de escoger trabajos remotos, híbridos y trabajar desde donde quieran en algunas áreas, aunque hay también puestos de trabajo más tradicionales. En cualquier ambiente es vital, dijo, tener un balance entre la vida laboral y la vida personal con mayor calidad.

Tanto Ignacio como Juliana, Guillermo y Oliver contaron en el conversatorio sus experiencias en el mercado laboral, cómo fueron sus primeros empleos y cómo se adaptaron a las exigencias que tenían en cada una de las responsabilidades que iban asumiendo. Todos coincidieron en que es vital tener empatía, compromiso, responsabilidad, un pensamiento crítico, trabajar en equipo y tener una capacidad para adaptarse teniendo a las personas como un centro de todo.

Oliver Proctor, director de King’s College School Panamá, resaltó la importancia de potenciar la educación con un currículo socio emocional para darle a los jóvenes las herramientas para desarrollar su inteligencia emocional y enfrentar con pensamiento crítico y propuestas de soluciones a los desafíos del futuro.
“Con la educación humana se está preparando a los jóvenes para ver el mundo con nuevos ojos y entender un poco más el contexto del mundo laboral en el que están entrando y la única manera es hacerlo con una educación personalizada. Antes un profesor daba una clase a 20 alumnos, ahora deben dedicar tiempo a cada uno, de forma diferenciada y con una atención personalizada”, agregó.

Proctor además destacó que King’s College School Panamá forma parte de Inspired Education Group, una red de más de 110 colegios en el mundo en los cinco continentes que les permite acceder a programas de intercambio de educación y conocimiento para los jóvenes estudiantes. “Tienen la posibilidad, no solo de conectarse virtualmente con otros alumnos y profesores, sino que también se pueden ir de intercambio a campamentos y clases a esas otras escuelas para enriquecer su formación y compartir con alumnos de distintas nacionalidades y pensamientos”.

La educación centrada en los alumnos, con la visión de crear líderes para el futuro con habilidades como la responsabilidad, el compromiso, la empatía y la habilidad de crear soluciones para un mundo que requiere cada vez más de humanidad, forma parte de la visión que se resaltó en el conversatorio.
