“Pon fin a las desigualdades. Pon fin al sida. Pon fin a las pandemias”. Este fue el lema de este 2021 con motivo del Día Mundial del Sida (1 de diciembre).
Con motivo de la fecha y para crear conciencia y sensibilizar sobre el virus de la inmunodeficiencia humana (VIH) ese día se presentó la obra Discordante, del director, productor y actor panameño Abdiel Tapia, en una función única en el teatro La Estación.
La obra contó la historia de Luis (VIH negativo) y Marco (interpretado por Tapia), quien, por ser seropositivo se niega la oportunidad a sí mismo de estar en una relación de pareja.
“Tengo VIH, soy seropositivo”, le repetía una y otra vez a Luis (Fran Rodríguez), quien insistía en el hecho de que podían estar juntos.
Luego de exámenes médicos e idas a especialistas, Marco finalmente acepta entablar una relación con Luis, quien se caracteriza desde un inicio por aceptarse a sí mismo tal como es.
En medio de ellos se encuentra Dora (Janett Vásquez), la madre de Marco, quien deberá pasar por un proceso hasta aceptar la preferencia sexual de su hijo.
Pese a las vivencias de cada uno de ellos expuestos en Discordante, el toque de humor no podía faltar.
A lo largo de la obra se hace énfasis en que los seropositivos pueden tener una vida normal como los demás (lo que en un inicio rechazaba el propio Marco), siempre y cuando sigan al pie de la letra con el tratamiento antirretroviral que le recete su médico.
Esto le permitirá llegar a un estado indetectable, lo que significa que prácticamente no se tiene virus en la sangre.
“El VIH hoy día no es igual a muerte”, expresó Tapia, al final de la presentación. Dijo que, con el teatro que es lo que hace, buscaba crear conciencia de que siguiendo el tratamiento y adecuados controles médicos, se puede tener una vida sana. De igual forma, Discordante tiene entre sus fines llevar ese mensaje de que el estigma y la discriminación que persisten contra los seropositivos se detenga de una vez por todas, subrayó.
“En estos tiempos nadie debe morir de sida”, dijo, por su lado, Orlando Quintero, director ejecutivo de la fundación Probidsida, que brindó su apoyo para la puesta en escena de esta obra.
“Con un diagnóstico temprano se tiene toda una vida por delante”, añadió.
El Ministerio de Salud estima que, en 2020, en el país había unas 31 mil personas viviendo con VIH; sin embargo, en los registros oficiales la cifra es menor: 20 mil 672, lo que implica que hay un número de ciudadanos que desconoce su estatus.
