De manera poética se podría decir que la construcción del Biomuseo de Panamá comenzó hace millones de años, cuando aún el propio istmo no estaba formado. Y es que el propósito de esta vistosa edificación es precisamente contar los orígenes de Panamá, que dicho sea de paso, cambiaron al mundo.
Partiendo de allí, no es difícil entender por qué personalidades, tanto nacionales como extranjeras, muestran particular interés por todas las maravillas que envuelven a este edificio. Tal es el caso de la historiadora colombiana Diana Uribe, la cual recientemente en su canal de YouTube (@DianaUribefm) dedicó su pódcast 186 al Biomuseo de Panamá.
Durante casi una hora, la también docente universitaria hace un ameno recuento, entre datos y anécdotas, del proceso de nacimiento de este museo único en el mundo afiliado al Smithsonian Institution (Estados Unidos).
Uribe utiliza sus anteriores visitas al museo y pláticas con sus guías para resaltar la importancia del surgimiento del istmo como responsable del Gran Intercambio Biótico Americano, hace alrededor de 3 millones de años, cuando especies provenientes de norte y sur América transitaron de un punto a otro por tierras panameñas.
Trayendo su narración a la actualidad, habla sobre la relación del arquitecto canadiense Frank Gehry con Panamá y cómo dichas conexiones ayudaron a que fuese este quien le diera forma al museo. Cabe resaltar que esta edificación es la única hecha por el reconocido arquitecto, de obras como el Museo Guggenheim Bilbao (España), en Latinoamérica.
“Dicen que el abejorro vuela porque no sabe que no puede volar (...) y el Biomuseo existe porque no sabe que no puede existir”, cuenta Uribe, mientras va deshilando parte de la historia del país que se relaciona con este museo de historia natural.
Una vez el contexto es presentado, la escritora de libros como Brújula para el mundo contemporáneo (2018) hace un recorrido por las distintas 8 salas del Biomuseo, como Panamarama, un espacio de proyección de 3 alturas y 10 pantallas que presenta las maravillas naturales de Panamá o El Parque de la Biodiversidad, el cual es considerado como la galería viviente del Biomuseo.
“El verdadero Biomuseo es Panamá. Panamá es un biomuseo viviente. Panamá es una maestría de la geología planetaria. Todos somos panameños porque todos somos resultado del surgimiento del istmo. Somos americanos, porque somos posibles por el istmo”, sentencia Uribe con voz orgullosa, no desde un país vecino (Colombia), sino desde un país hermano.


